Ante el posible adelanto de elecciones, la situación se vislumbra difícil, ya que, si en elecciones normales la oferta electoral es pobre, ahora será peor y sin aplicar las reformas aprobadas, según opinaron politólogos.

 

Jorge Luis Vallejo Castello, piensa que no se está preparando realmente nadie, ni en Lima ni en Chiclayo; “me parece que lamentablemente esto que se está queriendo hacer con tanta celeridad, quien termina sufriendo es el país al tener que escoger entre una oferta electoral pobre”, expresó.

 

Añadió que con organizaciones políticas que distan mucho de ser organizaciones serias, donde prima el compadrazgo, se arman candidaturas de un momento a otro, saltan de grupo en grupo, con débil adhesión que genera problemas para alcanzar mínimos consensos.

 

Además, hay muchas dudas sobre cómo va a ser el proceso, para comenzar la primera duda es la fecha, según eso dependerá el cronograma electoral. En tanto, los políticos solo pueden tratar de organizar sus bases, ver cuadros, tampoco se sabe si va a aplicarse democracia interna para decidir cuadros.

 

Por su parte, la politóloga Ana Ubillús Ticlla, manifestó que la problemática de elección poco transparente interna en las organizaciones políticas para definir pre candidatos, se abordó en una reforma política anterior, cuando se determinó la obligatoriedad de elecciones primarias. “Ahora estamos ante un proceso sui generis de elecciones adelantadas por la coyuntura política social y esto sacrifica algunas reformas importantes y aprobadas como esta”.

 

Sostuvo que para hacer un proceso electoral más abreviado, tienen que acortarse ciertos procedimientos, lo cual sin duda genera una preocupación; “porque me aúno en el requerimiento de los ciudadanos que las elecciones nos conlleven a un resultado en el que las autoridades elegidas puedan tener un mejor desempeño, estén más a la altura y evitar o minimizar las contingencias sociales y políticas que estamos viviendo ahora”.