La ejecución de la obra de reparación de veredas de la avenida Balta de Chiclayo ya no cuenta con el servicio de supervisión, tras culminarse el plazo del contrato el 1 de noviembre de este mes.

 

La Industria accedió a la carta n.° 1953-2022-MPCH/GIP-SGSLO, del 2 de noviembre de 2022, en la cual el subgerente de Supervisión y Liquidación de Obras de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh), Saúl Seminario Cabrejos, notifica al representante legal del contratista Q & Q Consultores y Ejecutores S.A.C, Fernando Quiroz Ayasta, sobre el término de plazo para la supervisión de la citada obra.

 

En dicho documento se precisa que, el 3 de junio de 2022 se contrata a la empresa Consultores y Ejecutores S.A.C para que realice el servicio de consultoría para la supervisión y liquidación del referido proyecto.

 

Además, se detalla que el plazo para el servicio de supervisión y liquidación culminó el 1 del presente mes.

 

Líneas seguidas, especifican “se solicita a su representada evaluar y dar trámite a toda la documentación que se encuentre en su poder en un plazo máximo de tres días hábiles”.

 

Dialogamos con el representante de la empresa supervisora, Fernando Quiroz, quien refirió “el problema es que están trabajando sin supervisión y sin inspector…hasta el 1 (noviembre) la supervisión terminó su plazo”.

 

“Acá el tema es que la entidad (MPCh) no se designa un inspector y el contratista está que trabaja de su cuenta, a parte que esa obra está con intervención de Contraloría”, dijo.

 

Agregó que se dio una ampliación de 24 días a la supervisión. “Mi (plazo) contractual terminó el 6 de octubre y me llevaron hasta el 1 de noviembre”.

 

Consultamos ¿cuál es el riesgo que no haya una supervisión en esta obra?, y explicó “ahorita la obra está en suspensión, el contratista no puede trabajar porque quién le supervisa los trabajos, ni inspector ni supervisor…la ley dice bien claro que los trabajos de ejecuciones de obra tienen que ser supervisados por un supervisor de obra o inspector”.

 

Añadió “a mí me deben lo de la ampliación de octubre, el monto es algo de S/ 22 mil”.

 

Este medio consultó en el portal del Sistema Electrónico de Contrataciones del Estado (Seace) sobre una reciente contratación de servicio de consultoría de supervisión en la citada obra, pero no figura.

 

Como si fuera poco lo que ocurre con la polémica obra de la gestión a cargo del alcalde Marcos Gasco Arrobas, también los órganos técnicos de la sociedad civil, llámese Colegio de Ingenieros y Arquitectos insisten en que el proyecto presenta graves falencias.

 

Ambos colegiados determinaron que se sigue evidenciando ineficiencia, por lo que exigen a la Contraloría de la República que sea célere en la emisión del informe de control.

 

Según indicó el decano del Colegio de Ingenieros de Lambayeque, Carlos Burgos Montenegro, conforme avanza este proyecto se sigue evidenciando la ineficiencia, que parte de un expediente técnico mal elaborado en la municipalidad de Chiclayo.

 

Observó que el 60 % de avance de la mencionada obra generaría un alto perjuicio económico a la municipalidad de Chiclayo, la cual invirtió más de S/4,1 millones en este proyecto y por lo tanto, se exige a la Contraloría General de la República, sea célere en la emisión del informe de control que elabora respecto al proceso constructivo, plazos y ampliaciones de la obra.

 

Burgos Montenegro, en su calidad de presidente del Consejo Regional de Decanos (CONREDE) Lambayeque y decano del CIP CD-Lambayeque, manifestó que habiendo realizado las visitas técnicas a la obra “Renovación de veredas y adquisición de mobiliario urbano de la avenida José Balta”, conforme avanza el proyecto se siguen detectando fallas, precisamente por un expediente técnico mal elaborado en la comuna provincial.

 

Los decanos del Colegio de Ingenieros y de Arquitectos, Carlos Burgos y Wilmer Ramírez, respectivamente, coincidieron al señalar que la falta de alineación en la construcción de las jardineras con el sardinel, entre la avenida Balta y las calles Vicente de la Vega y Lora y Cordero, es otra muestra que el expediente técnico está mal elaborado.

 

Todo indica que no se tomaron en cuenta aspectos importantes antes de su construcción, siendo así que incluso la pendiente de las jardineras en forma de pirámide trunca, podía causar accidentes a los peatones.

 

Por su parte, el decano del Colegio de Arquitectos, Wilmer Ramírez Namuche, informó que se detectó que hay jardineras que tienen un espacio entre la calzada peatonal (vereda) y el sardinel que colinda con la calzada de tránsito (pista), mientras otras no, desestimando aspectos fundamentales para determinar elementos de preexistencia, lo cual atenta contra el ornato.

 

Por otro lado, La Industria accedió al Informe de Orientación de Oficio n.° 030-2022 de la Contraloría General de la República, quien detectó que existió participación simultánea de la empresa supervisora Q Y Q Consultores y Ejecutores S.A.C en la obra de la avenida Balta y un proyecto vial de Reque.

 

En dicho informe se precisa que esta situación afectaría la dirección técnica exclusiva de las obras involucradas, lo cual posibilitaría el reconocimiento de prestaciones no brindadas en las obras que no estuvo presente.

 

Además, se detectó demora en absolución total de consultas formuladas por el residente de obra, lo cual podría generar retraso en la ejecución de la obra y mayores gastos a la entidad.

 

Como se recuerda, el decano de Ingenieros calificó la obra de la avenida Balta como una gráfica de la improvisación, sin consensuar los expedientes técnicos y proyectos; por lo que en su oportunidad, en mayo de este año, el CIP se pronunció y un mes después lo confirmó el Colegio de Arquitectos, al señalar que ese expediente estaba mal elaborado.

 

“Muchas veces los expedientes son copia y pega, en este caso no han contemplado el tema simétrico del alineamiento de las jardineras, que no se necesita ni ser especialista en el campo de la ingeniería o arquitectura para darse cuenta que está mal ejecutado”, enfatizó.