El establecimiento penitenciario de la provincia de Chiclayo registra más de 3 mil internos, por lo cual persiste el hacinamiento.

 

En declaraciones a los medios de comunicación, el director de la Oficina Regional Norte del Instituto Nacional Penitenciario del Perú (INPE), Walter Curo Apaza, indicó “hasta ayer (jueves) 3215 internos … teniendo capacidad el penal para alrededor de 1120”.

 

“Es de conocimiento público del hacinamiento, pero también el INPE enfocado en buscar en cómo fortalecer el sistema vivenciario, también buscar soluciones de ampliar el establecimiento penitenciario y de esa forma tener espacios”, comentó.

 

Respecto al ingreso de internos al penal, el funcionario explicó “hay días que no ingresa nadie, otros días entran 10, 5, 4”.

Agregó que la cifra de reos que salen del penal es inferior en comparación a los ingresos.

 

Precisó que la mayoría de los reos tiene condena en dicha cárcel por delitos contra el patrimonio, robos, hurtos, receptación agravada, entre otros.

 

Agregó que se cuenta con el personal suficiente para las labores al interior del establecimiento.

 

“Tenemos personal médico en el penal y muy al margen de esto también hay el apoyo del Minsa (Ministerio de Salud) para la atención en hospitales”, añadió.

Por otro lado, Curo Apaza refirió que un promedio de 20 trabajadores del INPE vienen siendo investigados.

 

“Tenemos intervenidos por hechos de antes, porque vienen siendo investigados; no es en situaciones de flagrancia, sino la Fiscalía investiga de tiempos atrás, entonces tenemos sobre 20 trabajadores que están separados”.

 

Precisó que recientemente se realizó la intervención de un trabajador por tratar de ingresar objetos indebidos al penal.

“Está sujeto en este momento a una investigación administrativa y obviamente también penal”, sostuvo.