Con el contundente Informe de Control Concurrente n° 016-2021 “Recepción, distribución y entrega de alimentos del programa Qali Warma a personas en situación de vulnerabilidad…”, el Órgano de Control Institucional (OCI) de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh) advierte una serie de graves irregularidades.
En el ítem “Conclusiones”, el OCI señala que la MPCh incluyó en el padrón de distribución de alimentos del programa Qali Warma como receptoras a personas que manifiestan no haber recibido dicho beneficio; así como a beneficiarios que no se encontraban en el grupo de riesgo identificado por la misma entidad y a personas que no residen en el distrito de Chiclayo.
Con esto, para el órgano de control se afecta el uso y destino de los recursos asignados para la atención de las necesidades básicas de alimentación a favor de la población en situación de vulnerabilidad.
“…aspecto que resulta de interés del Ministerio Público, por lo cual resulta pertinente remitir a dicho organismo el presente informe de control concurrente para las acciones que correspondan”, se lee en el documento.
HALLAZGOS
Según el informe de control, la MPCh estableció en su segunda solicitud (a Qali Warma) del 21 de mayo de 2021, que la atención alimentaria complementaria otorgada por Qali Warma sería solo para personas adultos mayores y personas con discapacidad, en razón de 3 622 y 2 592 bolsas de alimentos respectivamente.
“Se constató que se había coordinado previamente con una persona moradora tanto del sector El Edén como del sector El Paraíso del Norte, quienes elaboraron una relación de personas adultas mayores o con discapacidad que serían atendidos ese día”, reza el documento.
El OCI resalta haber constatado que el personal de la subgerencia de Asistencia Social y Alimentaria no contaba con un padrón de personas que iban a ser beneficiadas, “fueron unos moradores de ambos sectores quienes habían identificado previamente a las personas vulnerables que iban a ser atendidas”.
¿LAS FIRMAS ‘BAMBA’?
El informe de control precisa, “de la revisión de la documentación…no se evidencia la relación de las personas que han recibido los productos debidamente firmados e identificados con su DNI”.
El OCI menciona que, como resultado de la verificación se obtuvo que 110 personas que firmaron en señal de conformidad de recibir bolsas de alimentos, no son personas adultos mayores o personas con discapacidad, por lo tanto no se les debió entregar estos productos que estaban destinados a otros grupos en situación de vulnerabilidad.
“La comisión de control visitó y encuestó de manera aleatoria a 15 personas que aparecen en el padrón de distribución de alimentos, documento en el cual figura su firma y DNI como señal de conformidad y recepción de los alimentos….se precisa que cuatro de cinco personas que manifestaron no haber recibido la bolsa de alimentos, no coinciden sus firmas consignadas en base gráfica del RENIEC y en las encuestas con el padrón de distribución de alimentos, siendo el trazo diferente…”
Por último, el OCI añade “como resultado de las 15 encuestas realizadas, 5 personas indicaron que no habían recibido producto alguno, esto a pesar de figurar su firma de conformidad en el padrón de distribución de alimentos…asimismo, 12 encuestados no eran personas adulto mayor ni personas con discapacidad, por lo cual no debieron ser atendidos al no formar parte del grupo de población que iba a recibir los alimentos…”.