“Creo que apoyar con oxígeno no es un delito, no ha habido peculado de por medio, no ha habido corrupción debajo de la mesa, ni nada; si piensan que yo he cobrado que me abran mis cuentas de los bancos”, fueron las palabras del exdirector del Hospital Regional de Lambayeque (HRL), Jorge Ordemar Vásquez, sobre la investigación fiscal que se abrió respecto a la salida de oxígeno de la planta de este nosocomio hacia una clínica privada y al hospital de Chepén.

 

Dijo que mucho se viene especulando sobre este tema, pero las cosas son transparentes y existe un convenio que fue firmado la semana pasada con la clínica y con el hospital de Chepén no se pudo firmar, pero el director llamó desesperado; “es una institución de salud, quizá el error fue que era de otro departamento, pero Chepén está más cerca de Chiclayo, le dije que venga de inmediato”, explicó y acotó que el convenio estaba pendiente y eran 10 balones semanales a cambio de balones vacíos. Ya verá el nuevo funcionario si lo mantiene o desestima.

 

Sostuvo que esa era una forma de abastecer al HRL con balones de oxígeno, “creo que en esa parte las decisiones que tomamos fueron las más acertadas en el momento”.

 

Indicó que en dos meses el HRL se quedará sin balones de oxígeno y necesitan entre 100 a 120 balones para pacientes del Programa de Neumología que se tratan en sus casas. Mirando ese futuro hicieron los convenios; “ellos no saben cuáles son nuestras necesidades dentro del hospital, piensan que no queremos ayudar, nuestro lema siempre ha sido hacer el bien y no beneficiarnos ni nada por el estilo”.

 

Señaló que por todos es conocido que hubo un desabastecimiento total del proveedor de Oxígenos Linde, por eso apoyó al Almanzor, EsSalud de Tumán, Villa EsSalud de Ferreñafe y Sanidad de la Policía.

 

En cuanto a la clínica dijo desconocer si trata pacientes covid, pero se hizo el convenio, porque ante la imposibilidad de vender y la necesidad de balones de oxígeno sin contar con presupuesto, una forma de agenciarse de balones era hacer un intercambio interinstitucional. Enfatizó que en ese momento el balón vacío costaba S/800, hoy está por encima de 2500 a S/ 3000, por lo tanto, era un beneficio.

 

Sobre la planta, refirió que se compró para abastecer al hospital, no a la región y una cosa es la producción y otra la capacidad de llenado. Para el HRL se utilizan 2400 a 2600 m3, con el excedente de 600m3 se podía llenar 60 balones de 10m3 diarios, de ellos 30 a 40 van a La Victoria y el resto en un momento para la población, pero vino el desabastecimiento y aumento de casos en los hospitales.

 

Dijo que para duplicar la capacidad de llenado de balones, hizo en tiempo récord las gestiones del cableado para instalar el boaster, que debió estar listo el lunes que pasó y subrayó que beneficios a particulares desconoce, pues no estuvo permanentemente en la planta, sino en la oficina de la Dirección.