Fue publicado el Decreto Supremo Nº 023-2021-PCM, mediante el cual de acuerdo al nivel de alerta por provincia y departamento, Lambayeque pasó de nivel alto a muy alto, por lo que se deben acatar nuevas restricciones que regirán hasta el próximo 28 de febrero.

 

De este modo, la inmovilización social obligatoria de todas las personas en sus domicilios de lunes a domingo, será desde las 20:00 horas hasta las 4:00 horas. Además, dispone la prohibición del uso de vehículos particulares los sábados y domingos.

 

Casinos y tragamonedas, gimnasios, cines, artes escénicas (espacios cerrados o abiertos); restaurantes y afines en zonas internas; templos y lugares de culto; bibliotecas, museos, monumentos arqueológicos, centros culturales y galerías, jardines botánicos y zoológicos; actividades de clubes y asociaciones deportivas no podrán abrir. En otros establecimientos se han reducido los aforos.

 

Al respecto, el presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Lambayeque, Carlos Burgos Montenegro, criticó las restricciones, calificándolas como una estrategia fracasada; “no es posible que a prácticamente un año no hayamos aprendido ni previsto nada”, argumentó y preguntó qué han hecho las autoridades, a quienes –dijo– hay que darles un jalón de orejas y llamado de atención por poner al empresariado en jaque.

 

“Nosotros venimos de una manera directa e indirectamente aportando con ideas, estrategias, material, implementos, camas, oxígeno y el Estado no pudo haber entregado masivamente mascarillas y alcohol, y ahí recién pedir distanciamiento”, refutó.

 

“Saben que somos un país informal, particularmente Chiclayo, no se trata solamente de tomar medidas; así como la ministra fracasada de Salud ha dado un paso al costado, creo que este presidente también debería dar un paso al costado, no se está viendo ni se va a ver efectividad, ya tiene tres meses en el gobierno y no es posible que siga faltando oxígeno”, criticó Burgos, reiterando que se perjudica la economía de la región con grandes pérdidas.

 

El director del museo Brüning, Carlos Wester La Torre, dijo que deberán cumplir las disposiciones del gobierno, pero no se ve una respuesta ciudadana. “La cultura se ve tremendamente afectada producto de la incomprensión de la gente. Estamos tratando de empezar a hacer caminar nuevamente a nuestras instituciones, estos retrocesos generan problemas de mantenimiento, si no hay ningún ingreso el mantenimiento peligra”. Además, se mostró preocupado por las zonas arqueológicas que no pueden proteger.

 

El directivo de la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines (Ahora) Lambayeque, Dante Díaz, opinó que las medidas son correctas y solo queda cumplir con fe y optimismo porque están llegando las vacunas. “Nos afecta, pero no queda más que acatar las indicaciones las empresas formales, pero los informales seguirán incumpliendo”.