Integrantes del Consejo Regional de Juventudes (COREJU) consideran que hay desacato de jóvenes a medidas de distanciamiento social y toque de queda, pero también advierten falta de articulación entre instituciones públicas para enfrentar pandemia.

 

“Es preocupante para nosotros que nuestros jóvenes no acaten las medidas sanitarias dispuestas por el gobierno”, señala Yoel de la Cruz Llatas, secretario regional de juventudes de Lambayeque.

 

Y es que en las últimas intervenciones realizadas por la Policía Nacional, prefectura y Municipalidad Provincial de Chiclayo, son muchos los jóvenes a quienes se ha hallado en lugares públicos a pesar de la prohibición en prevención de la pandemia de covid-19.

 

“Que traten de evitar de ir a lugares innecesarios como son los reportados las últimas semanas, como son las fiestas y discotecas clandestinas. Hemos hecho hincapié en que respetemos las normas que el Gobierno dicta y que evitemos ir a lugares que no son de importancia”, sostiene.

 

Sin embargo, indica que también hay jóvenes que se ven obligados a salir a las calles porque tienen que trabajar. “Hemos tenido la oportunidad de conversar con un grupo de jóvenes de José Leonardo Ortiz, y muchos nos comentan que es la falta de ingresos”.

 

De las 22 organizaciones que conforman el Consejo Regional de Juventudes se está solicitando información para tener un registro de cómo se vienen comportando los jóvenes en algunos distritos y cuál es el nivel de acatamiento de las medidas de distanciamiento social y toque de queda dispuestas por el Gobierno nacional

 

“Como jóvenes evitamos salir, porque hay muchos de nosotros que vivimos con adultos mayores o que tienen algún tipo de enfermedad y no es adecuado poner en riesgo la vida de sus familiares. La mayoría salimos por temas de trabajo o apoyo social como lo venimos haciendo”.

 

En tanto, para Paul Martín Solís Vera, también integrante del COREJU considera que el desacato que actualmente se ve en algunos jóvenes está relacionado a la idiosincrasia de la población. “Al peruano le gusta la anarquía, el desacato”.

 

Sin embargo, cree que dicho desacato se da en un porcentaje mínimo de jóvenes, pero insiste en la idiosincrasia de este segmento de la población. Además, es de la opinión que quienes sí acatan las medidas sanitarias son aquellos que se encuentran mejor informados, quienes conocer los efectos reales de la pandemia y al mismo tiempo buscan prevenir contagios.

 

“Pero hay gente que no está informada o que se deja llevar por los comentarios de su entorno y por eso es que llegan al desacato (…) Pienso que una correcta campaña de comunicación sobre los efectos del virus, sería necesario”, indica Paul Solís Vera.

 

El joven dirigente señala que en algunas instituciones como las municipalidades no hay una articulación de las medidas en conjunto, que reúna a sociedad civil y organizaciones juveniles. “Si no hay articulación de medidas conjuntas, cada uno tira para su lado y las cosas no resultan como deberían ser. Sobre todo, deberían tener una mayor unión entre instituciones públicas”.

 

Yoel de la Cruz, secretario regional de juventudes de Lambayeque, pide también a los municipios que realicen una fiscalización real a los centros de diversión que vienen abriendo de manera clandestina y que se clausure a los locales que no cumplen con las medidas dictadas por el Gobierno.