Tras la publicación del Decreto de Urgencia N° 090-2020, emitido por el Poder Ejecutivo respecto al reinicio del internado médico en todo el país, este fue rechazado por el Consejo de Facultad de Medicina Humana de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo (UNPRG), por considerar que deviene en un atentado a la vida y salud de los internos, sus familias y la sociedad.

 

El Decreto de Urgencia N° 090-2020 dispone el inicio o la reanudación progresiva de las actividades de los internos de ciencias de la salud, durante el año 2020, en los establecimientos públicos del Ministerio de Salud, sus organismos públicos, de los gobiernos regionales, sanidades de la Policía Nacional del Perú y de las Fuerzas Armadas y del Seguro Social de Salud - ESSALUD, a partir del 15 de agosto de 2020.

 

Señala, asimismo, que para dicho efecto, las referidas entidades, de manera excepcional, durante el año fiscal 2020, proveerán los equipos de protección personal a los internos de las ciencias de la salud en los establecimientos de salud donde desarrollen sus actividades, según nivel de riesgo y la normativa vigente. Y que durante la vigencia de la Emergencia Sanitaria por la covid-19, los internos a los que se refiere la norma, tienen derecho a un estipendio mensual equivalente a una remuneración mínima vital; asimismo, un seguro de salud.

 

El Consejo de Facultad de Medicina Humana de la UNPRG se pronunció sobre esta medida anunciada por el Ejecutivo nacional, considerando que el decreto de urgencia en cuestión, pretende “de manera autoritaria y sin respetar posiciones de los involucrados, la implementación compulsiva del reinicio de internado médico”.

 

En el documento firmado por el decano del consejo de facultad, Alejandro Cabrera Gastelo y el secretario docente, Juan Giles Añí, se señala que en el DU N° 090-2020 “se refleja la desesperación del Gobierno ante su incapacidad de controlar la reagudización de la pandemia covid-19 y paliar o mitigar la aguda crisis sanitaria, social, económica y desestabilización política”.

 

Considera que ello deviene en un atentado a la vida y salud de los internos, sus familias y a la sociedad, al no garantizar la provisión de Equipos de Protección Personal, ni la seguridad de un Sistema de Vigilancia Sanitaria en los establecimientos de salud.

 

Asimismo, se indica que no contribuye al fortalecimiento del proceso formativo de los nuevos médicos, al disponer que sus prácticas las hagan en los establecimientos de salud del primer nivel que no reúnen las condiciones adecuadas para desarrollar las actividades académicas y asistenciales, y están contaminadas por el coronavirus.

 

También señala que se genera maltrato económico e incertidumbre en los internos al ofrecerles un estipendio durante el periodo de la Emergencia Sanitaria sin perspectivas a futuro.

 

Frente a esta situación, se rechaza y pide la derogatoria del cuestionado decreto de urgencia “por su carácter antidemocrático y lesivo a los intereses formativos del médico y a la salud de la población peruana”

Se exige que el reinicio del internado se dé en condiciones de estabilidad epidemiológica y el Estado cumpla con la provisión de los equipos de protección personal y la garantía de un sistema de vigilancia sanitaria adecuada en los establecimientos”.

 

Alejandro Cabrera Gastelo indica que en la actual situación de la pandemia, el Ministerio de Salud de manera abusiva saca este decreto de urgencia para cerrar la brecha de recursos humanos y llama a los internos, que en el país deben ser entre cuatro mil a cinco mil.

 

“Son jóvenes que ingresan a aprender y no tienen responsabilidades sobre el manejo de un paciente y son colaboradores de los médicos. A ellos se les está pidiendo el rol de médicos, lo cual es irresponsable por parte del Estado, el propósito del internado es terminar con su formación profesional”, sostiene Cabrera Gastelo.