Ayer se realizó una campaña de donación de sangre con el propósito de salvar vidas de niños con cáncer que permanecen en los diversos hospitales de la región a la espera de ayuda. La actividad fue realizada por la organización sin fines de lucro ‘Corazón que late, necesita donante’ en un conocido hotel chiclayano.
“Un niño con cáncer puede requerir hasta dos unidades de sangre diaria, dependiendo de su grado de diagnóstico y lo que queremos es que su familia pueda aliviar la búsqueda de donantes, porque es una acción desesperada. La cultura de donación de sangre viene creciendo, pero queremos que la asistencia sea aún mayor en favor de estos niños que más lo necesitan”, declaró Sonia Rodríguez.
Explicó que la donación de sangre tiene sus beneficios, como el descarte de enfermedades en los interesados previo a la donación, así como la satisfacción de haber apoyado a una familia a no perder las esperanzas. Precisó que no cualquier persona puede ser donante, por ello se realiza un proceso de filtración, donde se tienen muy en cuenta los requisitos básicos de salud.
La representante de esta organización mencionó que en muchas de las ocasiones las unidades de sangre también son destinadas para niños quemados que aguardan en los nosocomios, pues su situación también es crítica.