Madres de familia del distrito de Pacora se muestran preocupadas por los resultados del informe de la Gerencia Regional de Salud (GERESA), que dan cuenta que de un total de 312 niños sometidos a exámenes, 167 han dado positivo a la exposición de arsénico, tras consumir agua contaminada con este metal.
El solo hecho de conocer el riesgo al que están expuestos los niños, llevó a las madres de familia de este distrito a realizar una protesta frente a la municipalidad y sumarse al pedido del alcalde, Virgilio Vidal Arboleda, de solicitar se declare en emergencia a Pacora.
Ayer, cuando se realizó la reunión multisectorial con la presencia de diversas autoridades para abordar la problemática de la contaminación del agua con arsénico, muchas de ellas no dudaron en participar y demandar se atienda a los menores afectados con chequeos médicos y un tratamiento especializado para descartar riesgo en su salud.
Pero no solo los niños corren riesgo, también las personas adultas, a quienes aún no se les ha realizado examen alguno. Por ejemplo, en la reunión de este miércoles, la pobladora María Castillo, quien padece de Still del adulto, cuestionó que a pesar que hace mucho tiempo se sabía del problema del agua con arsénico que consumía la población, no se hizo nada.
“Las personas con enfermedades autoinmune, consumimos diariamente altas dosis de corticoides. Qué nos dicen los médicos cuando vamos a nuestras consultas: cuídense de las comidas, tomen agua adecuada, cuídense del sol, no se pueden bañar en cualquier agua, porque están propensas a tener cáncer a la piel”.
Por ello, el pedido de instalar una unidad médica permanente en Pacora, fue bien recibida a fin de controlar la presencia de arsénico en el organismo de los pobladores.