El desorden en el sector transportes parece un problema sin solución y la situación se ha tornado muy complicada para los miles de taxistas que a diario circulan por el centro de la ciudad, porque muchas calles fueron cerradas por las obras para la conexión de gas domiciliario.
“Estamos hablando de un congestionamiento vehicular de hasta media hora a 40 minutos, eso es consumo en vano de combustible y esas son pérdidas para el transportista”, dijo Juan Vásquez García, presidente de la central de taxis.
Para el dirigente, toda esta situación que se vive en el sector del transporte, es por la falta de proyectos de la municipalidad de Chiclayo, que en casi un año no ha dado solución a la informalidad y ahora se han sumado las obras para la instalación de gas doméstico.
“Tenemos funcionarios que no están al nivel de las necesidades, no hay capacidad para solucionar el problema del transporte y han sumado a todo esto los trabajos para la instalación de gas, ahora el tráfico es crítico”, expresó el dirigente.
Agregó que en este primer año de gestión tampoco se ha convocado a una licitación para el terrapuerto, que es esencial para sacar al transporte masivo del centro de la ciudad. Tampoco se ha trabajado en el tema de los paraderos informales que siguen invadiendo las calles, como Mariscal Nieto, avenida José Balta, Pedro Ruiz, Leoncio Prado, 8 de Octubre y otras.
En respuesta el alcalde de Chiclayo, Marcos Gasco Arrobas, sostuvo que sí se vienen elaborando los proyectos de ordenanza para el sector transporte, sin embargo se encuentran estancados en el Ministerio de Transportes, en consulta.
“Estamos en conversaciones con el general Julio Díaz Zulueta para que el próximo año, poder hacer las cosas en conjunto, tengo muy buena disposición de la policía para poner fin al caos en el transporte. Ya lo verán, vamos a aprobar muchas ordenanzas”, manifestó la autoridad edil. Adelantó que las obras para la instalación de gas domiciliario demorarían tres años.