En la región Lambayeque, el cáncer de mama, piel y cuello uterino, son los que lideran, a diferencia al año 2018, cuando el orden era cáncer de mama, seguido del cuello uterino.

El año 2018 cerró con 2294 cáncer de mama, 1482 casos de cérvix y 684 casos de cáncer de próstata, colon y recto.

Pero que es realmente el cáncer de cuello uterino, es un tipo de cáncer que se produce en las células del cuello uterino (la parte baja del útero que se conecta con la vagina). Varias cepas del virus del Papiloma Humano o una infección de transmisión sexual, tienen un rol importante en la aparición de esta enfermedad.

Sin embargo, estas cifras podrían ser diferentes si la población apostará por la prevención como es la Vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH).

El coordinador de la Estrategia Sanitaria de Inmunizaciones de la Gerencia Regional de Salud, José Antonio Enrique Salazar, explicó acerca de esta vacuna que es aplicada en las instituciones educativas a niñas que cursan el quinto grado de primaria o están entre las edades de 9 y 13 años.

La Geresa tiene programado vacunar a 11 mil 309 niñas contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), de las cuales 9 mil 335 fueron vacunadas con la primera dosis y están aptas para la segunda; sin embargo, siempre hay el rechazo de los padres para firmar el consentimiento informado, por diversos motivos, ya sea dolores, malestar, fiebre y hasta la errónea idea de que sus hijas puedan quedar estéril.

Para ello se trabaja tanto con los docentes como padres de familia. A través de charlas, se les explica exactamente los beneficios de aplicarse la vacuna, así como rechazar la protección.

Para autorizar dicha vacunación, los padres de familia deben firmar el consentimiento informado, formato que es repartido en los colegios y que debe ser devuelto al plantel con la rúbrica del padre, madre o tutor. Si la niña no pudo ser vacunada en el colegio, también puede ser vacunada en un centro de salud, llevando el consentimiento informado.

“Aunque no parezca, la zona rural es donde hay mayor aceptación de la vacuna porque los docentes son quienes transmiten la información. Por citar un ejemplo, en instituciones privadas como el Santa María Reina, es un colegio público muy reservado, se puede mal interpretar la situación, no dejan que se les vacune a las niñas sin la presencia del padre, a pesar de haber firmado el consentimiento”, enfatizó.

La aplicación de la vacunación se realiza cada seis meses a las niñas que cursan el quinto grado de nivel primario.