La llegada de ciudadanos venezolanos y el consumo de drogas son los principales problemas de inseguridad ciudadana en los distritos de Ciudad Eten y Puerto Eten, según versiones de la máxima autoridad política.
Ciudad Eten dejó de ser un distrito pacífico con la llegada de ciudadanos venezolanos. La subprefecta manifestó que se registran casos de mujeres venezolanas; quienes mantienen relaciones amorosas con ciudadanos peruanos casados, iniciando todo un problema. Además, han identificado chicheríos, donde se registran escándalos.
Se cuenta con 25 policías, pero no hay Serenazgo. Respecto a cámaras de vigilancia, de parte del municipio solo hay 2 instaladas; sin embargo, los vecinos han invertido en su seguridad y han instalado sus propias cámaras.
Por su parte, el jefe de la División de Seguridad Ciudadana, César Chancafe Apaestegui sostuvo que recientemente el municipio ha empadronado a familias venezolanas, lo que suman a 101 personas. Sin embargo, se conoce que hay 200 extranjeros más.
Los venezolanos se dedican a labores de construcción civil, transportes, comercio informal ya sea de arepas, cañas y otros productos, ocupando la vía pública. En un reciente operativo con la PNP se halló que la mayoría de venezolanos no cuentan con los documentos que avalen su legalidad en territorio peruano.
En Puerto Eten, se ha identificado hasta 12 personas que consumen y promueven las drogas. La subprefecta dijo que se ha controlado el consumo en los parques y espacios públicos, pero ahora la población consume en su propia casa, por lo que imposibilita intervenir.
Con las 27 juntas vecinales, 30 efectivos policiales y 6 serenos se realiza el patrullaje integrado en el centro de Puerto Eten y los alrededores. A este trabajo también apoya la Capitanía de Puertos.
La población reclama por la falta de cámaras de vigilancia, lo que facilitaría la identificación de extraños y consumidores de drogas.
La subprefecta, Pizarro Chima expresó que la población conoce los números del comisario, jefe de la Oficina de Participación Ciudadana, y subprefectura, para que se comuniquen ante cualquier situación donde se sientan inseguros. La comunicación es rápida al igual que la intervención.