La presencia de ciudadanos extranjeros en el distrito de Olmos aumentó, es por eso que se busca censarlos a fin de llevar un registro de cuantos y a que se dedican.
El gerente de Seguridad Ciudadana, José Luis Nonura Soplapuco sostuvo que se está programando varios operativos a fin de dar con el paradero de estas personas, que en su mayoría llegan a trabajar en las empresas que comprende el proyecto Olmos.
“La mayoría llega a trabajar, pero hay otros que no, es por eso que queremos contar con un registro”, comentó.
Si bien la seguridad ciudadana en el distrito era alarmante, a partir de este año mejoró, con la instalación de 23 cámaras de vigilancia en la zona urbana, y la implementación de este servicio con una camioneta 4x4, dos motos lineales, diez radios para estar interconectados con la policía y todo el equipamiento correspondiente.
Además se cuenta con 15 serenos que ayudan en el patrullaje integrado que se realiza con los 35 policías con los que cuenta la comisaría.
Uno de los problemas sociales latentes es la violencia familiar. El funcionario remarcó que con la instalación de las cámaras y la presencia de la Unidad de Serenazgo en calles, las mujeres se animan a denunciar.
“Antes no denunciaban porque no tenían tiempo o dinero para viajar hasta Chiclayo o Motupe, los lugares más cercanos y llevar todo un proceso. Ahora ven al personal de seguridad y les dan ánimos”, aseveró.
Sin embargo, el número de efectivos policiales y cámaras de vigilancia no son suficientes para brindar seguridad en la zona rural, donde se registran los casos de abigeato.
“Se está elaborando un proyecto de seguridad ciudadana para unir a la zona urbana y rural, teniendo en cuenta que Olmos cuenta con más de 50 mil habitantes y más de 200 caseríos y centros poblados”, expresó Nonura Soplapuco.
Las 32 juntas vecinales con las rondas también aportan en esta lucha y participan en los operativos programados.