Las bondades de la lactancia materna son de sobra conocidas por todos, pero amamantar al bebé no sólo tiene beneficios para él sino también para la madre, puesto que ayuda a prevenir diversas enfermedades y a quemar calorías en poco tiempo.

 

La decana del Colegio de Nutricionistas, Martha Ynami Vizcaya, indicó que la lactancia ayuda a la madre a quemar más calorías y recuperar rápidamente su peso corporal, así como protegerla de enfermedades y es posible que también sirva como medida preventiva para el cáncer, diabetes y minimiza las posibilidades de sufrir un infarto.

 

Explicó que la lactancia materna durante los seis primeros meses de vida es fundamental para el ser humano, ya que son las bases para repotenciar su desarrollo, pero lo ideal también es que la lactancia continúe hasta los 2 años de edad.

 

“Lo ideal es hasta los 2 años de edad, puesto que tendrá el valor nutritivo y permitirá su máximo desarrollo, además del lazo efectivo, es algo que sienta huellas de por vida”, expresó.

 

Actualmente por cuestión de tiempo, las madres utilizan para la alimentación del bebé, leche maternizada, la cual jamás va a reemplazar a la lactancia materna no solo por su contenido sino por el afecto de la madre.

 

“La leche materna desde el punto de vista de seguridad alimentaria es el primer alimento que recibe el niño, con el cual se protege su calidad de vida, desarrollo personal, en lo físico e intelectual; sin embargo, por cuestión de tiempos o apoyo familiar, muchas madres desisten de darles el pecho y luego vienen las consecuencias”, comentó la nutricionista.

 

Una de las desventajas de la leche de fórmula es que, intenta reproducir la calidad nutrimental de la leche materna; sin embargo, no contiene ni las sustancias inmunológicas, ni las hormonas que promueven el adecuado crecimiento del niño.