Cuatro procesos administrativos en marcha en la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) Chiclayo y una investigación en el Ministerio Público, por condicionar las matrículas escolares, mantienen igual número de directores de colegios.
El gerente regional de Educación, Daniel Suárez Becerra, refirió que este año se ha tenido que actuar con severidad para que casos similares no se presenten en las escuelas de Lambayeque. Además, señaló que los casos más sonados y notorios de condicionar las matriculas escolares a un aporte económico se dieron en la provincia de Chiclayo, donde se presentaron hasta cuatro denuncias.
“En otros años eran mucho más todavía. Pero ya los directores están tomando conciencia en ese sentido y se ha podido actuar con severidad, con justicia, haciendo las denuncias correspondientes. Y las investigaciones se han dado en el transcurso del año y siguen su proceso”, recordó el gerente de Educación.
Señaló que uno de los colegios, donde su directivo tiene mayor dificultad, es la institución educativa COSOME (N° 10828). “El profesor César Chang se evidenció, porque intervino no solamente la gerencia (Educación), la UGEL Chiclayo, sino también la Fiscalía, por condicionar la matrícula de los alumnos de primer grado”.
Suárez Becerra indicó que en este caso se creó una especie de asociación paralela al consejo directivo “y tengo entendido, no solo está en proceso administrativo en la UGEL, que está avanzando, sino a nivel de la Fiscalía y creo que hay responsabilidad mucho mayor (penal)”.
El gerente de Educación recuerda que otro de los colegios intervenidos fue la I.E N° 10022 Miguel Muro Zapata, que está en un proceso abierto en la UGEL Chiclayo. Asimismo, los colegios Nuestra Señora del Rosario y el Karl Weiss, que en su momento fueron denunciados.
Recordó que en el caso del colegio COSOME “se ha llegado a casos extremos. En ese colegio el director ha sido sancionado, hace poco, pero por un proceso similar, por direccionamiento en cuestiones de matrícula el año pasado, es reincidente. Esto un poco que se agrava”, lamentó.
Además, precisó que el llamado a los directores de colegios ha sido actuar en torno a la ley, evitando condicionar las matrículas a pago alguno.
“Esa brecha, que para nosotros era difícil cerrarlo, lo hemos tratado. Todavía seguimos arrastrando. Por ejemplo, el problema del colegio (Nuestra Señora del Rosario) sigue hasta ahora, en el sentido de que se ha complicado, porque hay una asociación de padres de familia que ha tenido dificultades con la directora y que no se le ha permitido trabajar a la presidenta que ha sido elegida por todos los padres de familia”.