Durante los seis meses de gestión que han emprendido las autoridades en la región Lambayeque, aún no se logra aplacar los problemas que se viven en los 38 distritos.

 

El obispo de la Diócesis de Chiclayo, Monseñor Robert Prevost Martínez evaluó la situación y mencionó que todavía falta mucho por hacer.

 

“Es evidente que falta mucho, hay que seguir trabajando en la limpieza, seguridad, orden, también en la lucha contra la corrupción y violencia hacia la mujer y niño”, expresó.

 

Las autoridades aún no han implementado planes de trabajo que permita dar seguridad social y generar orden tanto en espacios públicos como en toda la ciudad.

 

Señaló que todos debemos trabajar como unidad para mejorar la sociedad en tiempos muy difíciles donde la violencia contra la mujer y niños sigue siendo una enfermedad muy grave.

 

“Los católicos somos las mayoría y debemos estar convencidos

 

en el mensaje de fe, de querer trabajar para mejorar la sociedad en tiempos muy difíciles donde la inseguridad, violencia contra las mujeres y niños sigue como una plaga, una enfermedad muy grave”, expresó.

 

Monseñor también se refirió a la confusión que existe por la llamada igualdad y enfoque de género.

 

Sostuvo que no es aceptable cuando se empieza a negar la naturaleza del ser humano para luego introducir nuevas categorías dentro del género.

 

“En esta ideología o propuestas de enfoque de género donde ya no hay varón ni mujer, sino hasta 115 géneros ya empieza los problemas, porque se niega la naturaleza del hombre y la mujer”, expresó.

 

Explicó que desde la Iglesia se están convencidos de promover la familia, como elemento constitutivo de la sociedad y no para destruir a la familia.

 

“Algunos miembros del gobierno están promoviendo una idea que destruye a la familia que busca promover la unión de dos personas, pero como Iglesia vamos a enseñar lo que es hombre y la mujer, puede haber otros géneros, pero jamás van a ser una familia”, comentó.

 

El obispo enfatizó que según la Doctrina Social de la Iglesia, siempre son tolerantes, se acepta y respeta a todas las personas, pero siempre defendiendo la constitución de la sociedad.