A cinco días de iniciar el 2019, dos feminicidios se han registrado en el Perú. A Clorinda Bonifacio (49), le quitó la vida a golpes su exesposo; mientras que en el caso de Lizbeth Romero, su presunto victimario fue su pareja, quien está como no habido.

 

“Lamentamos lo sucedido y esperamos que en Lambayeque no se registre ningún feminicidio durante este año”, indicó Angélica Musayón Chira, coordinadora regional de la Confederación Ciudadana de Mujeres de Lambayeque.

 

Asimismo, mencionó que la violencia a la mujer, es uno de los problemas que las autoridades deben atender con prioridad.

 

“Se necesita un compromiso más firme, explícito, contundente y sobre todo, presupuestable por parte de los gobiernos regionales, provinciales y distritales”, señaló.

 

En ese sentido, explicó que Chiclayo no cuenta con una casa de refugio. “La casa de la beneficencia está mal orientada, prácticamente es inaccesible”, comentó Angélica Musayón. Por ello, hizo un llamado a las autoridades, para que puedan darle un nuevo enfoque a la administración.

 

Todos los alcaldes tienen el mandato de la ley orgánica de municipalidades que les permite construir casas refugios. Esperamos que puedan hacerlo en nuestra región, porque de verdad lo necesitamos. “Cuando una mujer está en situación de violencia, salir de ese espacio de riesgo, le salva de los feminicidios”, sostuvo.

 

Además, resaltó que se deben elaborar políticas públicas para atender esta problemática. Del mismo modo, desarrollar programas para el crecimiento de capacidades y habilidades de las mujeres, por ejemplo talleres de emprendimiento económico y espacios de información, donde se den a conocer las oportunidades que brinda el estado y las organizaciones privadas en favor a ellas.

 

Para las mujeres que sufren la vulneración de sus derechos (han sido ultrajadas sexualmente), es importante, que exista un centro de asistencia para su recuperación e integración en la sociedad, manifestó la coordinadora regional de la Confederación Ciudadana de Mujeres.

 

“Es importante, que las nuevas autoridades, se proyecten este tipo de espacios, no porque seamos mujeres, sino porque las estadísticas dicen que somos la población más afectada y vulnerada. En nuestra región, más del 50% de la población somos mujeres”, culminó Angélica Musayón.