Los alrededores del mercado Modelo de Chiclayo son imposibles de transitar y se debe emplear más tiempo.
Conforme se aproxima la Navidad, las calles de Chiclayo se vienen convirtiendo en un verdadero caos, especialmente en los alrededores del mercado Modelo, donde los conductores no pueden avanzar con sus unidades y, si ingresan, deben permanecer cerca de una hora para poder salir de este lugar.
La tugurización crece cada día conforme se acercan los días festivos; las personas van de un lado a otro en busca de regalos, adornos y todo lo que van a consumir en la cena navideña. A partir de las 6:00 de la tarde, la situación se torna más complicada aún pues muchas personas salen de trabajar y acuden a efectuar sus compras de última hora.
es una de las más congestionadas de Chiclayo, dada su proximidad al principal centro de abasto; se observa gran cantidad de vehículos tratando de ir de un extremo a otro.
Esta avenida se congestiona en todas sus intersecciones, sobre todo con Alfredo Lapoint, uno de los puntos donde convergen negocios relacionados con adornos y decoración para la Navidad.
ATOLLADEROS
Se forman atolladeros que permanecen durante varios minutos, sin que los autos puedan avanzar. Hay efectivos de la Policía Nacional, pero es difícil aligerar el tránsito, prácticamente imposible, más aun con el doble sentido que adoptaron las avenidas producto de las disposiciones municipales.
Esto lo recuerdan los conductores, precisamente cuando son consultados por la incomodidad de manejar en estos días previos a las fiestas, recuerdan a la alcaldesa y sus ideas de convertir las vías en doble sentido.
Se recomienda no venir al centro con auto particular, porque, además del congestionamiento, no es posible parquear en ninguna parte, así se podrá ahorrar dolores de cabeza innecesarios.
El cruce de Pedro Ruiz y Balta es otro problema; en realidad, todos los alrededores del Modelo se han convertido en un caos vehicular y peatonal, sin ninguna salida.
PREOCUPAN LOS BOMBEROS
Dentro de todo este caos e inseguridad, preocupa la situación de los efectivos de la Compañía Salvadora Chiclayo N° 27, quienes tienen su local en medio de todo este desorden, y para salir a atender una emergencia, demoran más de lo normal.
Ya han hecho dos ensayos, y si bien es cierto, en la segunda oportunidad mejoraron un poco las cosas, el tiempo que utilizan para su desplazamiento sigue siendo un problema debido a que es muy extenso.
La cantidad de ambulantes y tráfico vehicular les impide avanzar como es debido.
Quienes se atreven a ingresar a la calle Arica se quedan ahí por lo menos una hora para poder volver a salir. Solo se escuchan bocinas, claxon, alguno que otro insulto de conductores estresados, a dos días de la Nochebuena.