El Papa León XIV dejó trazado el camino, es momento de agradecerle de la mejor manera, empezando por la autoridad local para promover este milagro.
Chiclayo y toda la región Lambayeque tienen la oportunidad única de impulsar su desarrollo turístico religioso; sin embargo, parece que aún no nos la creemos y lo que es peor, no tomamos en cuenta la gran manifestación del amor de Dios, a través del Niño Jesús que apareció en la hostia consagrada allá por el año 1649 en Ciudad Eten. Hoy sería nuestro imán al resto del mundo, ya que nuestro Papa León era su fiel promotor.
El integante del Grupo Católico Milagro Eucarístico Perú 1649, José Gálvez Arenas, sostiene que tenemos representantes que no dan la talla, tanto en el sector público como privado, gobierno nacional, regional y gobiernos locales en sus niveles de competencia.
En principio, el desarrollo económico local es competencia municipal, regional y nacional. En las municipalidades hay comités de gestión local, pero se utilizan para cualquier cosa, menos para el desarrollo local o turístico.
Por lo tanto, el primer componente que no está actuando correctamente es el gobierno local, al no contar en primer lugar, con un gestor de turismo. En su ROF (Reglamento de Organizaciones y Funciones), Turismo lo tiene como Desarrollo Social cuando claramente es de Desarrollo Económico. “Eso se llama indiferencia y pasa en la mayoría de municipios distritales, es una temática que no se toma en cuenta, la municipalidad debería estar trabajando en turismo y no ha hecho nada hasta hoy”, enfatiza.
Esta inacción eterna ha hecho que el milagro de hace 376 años años quede prácticamente en el olvido, al extremo que hay unos invasores que se han apoderado de un bien de la Iglesia y hacen lo que quieren en este espacio. “La indiferencia permite el maltrato a un bien que le pertenece a la población. Entonces allí hay que trabajar identidad, revalorización del hecho que ha pasado al olvido y Robert Prevost desde que asumió el obispado nos ha dejado la huella de una acción permanente en solitario”, subraya.
Resalta que con su tenacidad, empuje y acción logró mover ese asunto, al extremo que se desnudaron curas falsos, apropiación indebida, usufructo de los bienes para temas personales.
Existe un trabajo arqueológico del año 2009-2010 que por razones presupuestales no siguió, pero lo han tapado con jardines y esa agua está maltratando al bien antiguo. La inacción es la que genera este tipo de destrucciones.
Mientras todos se encuentran viendo temas diversos, no se preocupan, con contadas excepciones, por este lugar (Capilla del Milagro Eucarístico) buscando edificar un santuario.
José Gálvez manifiesta que se está pensando en distintas iglesias que tienen que estar en la Ruta del Papa, lo cual es válido, pero la pregunta es: ¿algún visitante de algún país del mundo vendrá a ver una iglesia? habiendo miles de iglesias en el Perú con esas características y millones de iglesias en todo el mundo, ¿va a tomarse un vuelo internacional para llegar a ver eso? ¿será atractivo eso? Al parecer, no hace la diferencia.
“Se necesita algo potente que haga la diferencia, lo hace el Milagro Eucarístico que no existe en ninguna parte del Perú. Sus caminos son válidos, mientras más comunidades estén es mejor, pero eso no hace la diferencia”, argumenta para captar aunque sea a una parte de los cinco mil millones de personas que tienen interés en visitas religiosas.
El tema aquí es atraer flujo. “Es cuestión de enfocarnos bien, estoy a favor de una iglesia como atractivo, pero no marca la diferencia y las autoridades tienen que enfocarse en el desarrollo económico local”, sostiene Gálvez Arenas, quien les recomienda que revisen sus documentos de gestión y trabajen en algo concreto, no en lo mediático, como lo son unos actores que vienen a grabar escenas de una serie por ejemplo.
“El próximo año van a comenzar a llegar personas de otros lados para ver el milagro del cual habla el Papa, ¿y qué van a ver? un terreno invadido, van ver nuestra dejadez”.
“Aquí tenemos Divino Niño del Milagro desde hace 376 años y no hay fervor popular, no existe, no hay identidad. Ese es el principal problema, que el ciudadano de Chiclayo, de la región Lambayeque no toma el milagro como propio, hemos perdido identidad”.
Siendo el milagro lo único diferencial que tenemos del Perú no lo aprovechamos; “la principal ruta del Papa es conducirnos hacia el Divino Niño, hacia el Milagro Eucarístico. El Papa algo nos está gritando en silencio, despierten, tenemos la Ruta del Papa León XIV, la principal ruta que tienes que transitar es camino a la eucaristía”, finaliza.
SITUACIÓN DE DESVENTAJA
Para el integrante del grupo del milagro, la decisión del Mincetur de poner como cabeza de la Ruta del Papa a Trujillo, significa que toda la gestión, financiamiento y lo que significa programas de desarrollo lo van a coordinar primero con La Libertad y luego ver qué va para otras regiones. “Es una manera muy ‘técnica’ de hacer un embudo y dejar nuevamente a Lambayeque en una situación desventajosa”, critica y añade que el Papa por sensatez mencionó a Chiclayo donde fue obispo, en cambio en Trujillo fue jefe agustino. “La mirada más fuerte de Robert Prevost está en Chiclayo y uno de sus lugares con mucha prevalencia es precisamente destacar y desarrollar el milagro eucarístico de 1649 único en el Perú, no hay otra localidad que tenga esta fortaleza”.