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Publicado el Domingo, 13 de Octubre del 2019

Puente Reque entre la desidia y el olvido

Solo en épocas de emergencia se acuerdan de “él” porque pone a “temblar” a los transportistas. No solo se trata del actual viaducto, sino del nuevo puente de la autopista El Sol. Ambos prácticamente en nada

 Quién no recuerda el terrible fenómeno El Niño del año 1998, cuando Lambayeque quedó incomunicado ante el colapso del puente Reque. Muchos meses pasaron para que se instale en forma provisional, la infraestructura que hoy se ha convertido en definitiva, ante la indiferencia de las autoridades de turno y la propia población, que no supieron luchar por contar con un viaducto que resista las inclemencias climáticas que cíclicamente se registran en esta parte del país.

Transcurrieron 19 años, y solo durante el año 2017 con El Niño Costero, volvió a tambalear la estructura de nuestra principal vía de comunicación con el resto del país, que desde fines del mes de marzo de 1998 se instaló con bombos y platillos, pero en forma provisional.

En el 2009 se amplió 50 metros, convirtiéndose en un puente de 150 metros de longitud, con un costo de aproximadamente 10 millones de soles, cuando con 10 millones de soles más, hubieran podido cambiar todo el viaducto, según recuerda el presidente de la Comisión de los Grandes Proyectos Regionales del Colegio de Ingenieros de Lambayeque, Carlos Balarezo Mesones.

Balarezo Mesones recuerda que muchos entendidos en el tema manifestaron que la ampliación no era una obra técnicamente justificada, pero aun así continuaron con ésta, teniendo como último objetivo los funcionarios de aquel entonces en el Ministerio de Transportes y Provias, darle el carácter definitivo al hasta entonces provisional puente Reque.

Esa fue la historia de su cambio de categoría, por así decirlo. No obstante, en los últimos meses su estructura sufrió fisuras, incluso comenzó el hundimiento de la losa y otros problemas que requerían otros arreglos, que al parecer no se han ejecutado. Una parte de las fisuras se arregló, pero faltó darle mantenimiento a otros tramos.

Paralelamente se construyó el puente Monsefú - Eten, supuestamente alterno en caso sufriera daño el puente Reque, además del puente Hércules en Saltur. Sin embargo, a raíz de las fisuras sufridas se descubrió que el puente que une Monsefú con Ciudad Eten no resiste gran tonelaje, tan solo vehículos menores y buses; para el tránsito pesado solo queda el puente Hércules.

Si sucediera un nuevo problema, el tránsito pesado tendría que desplazarse por el puente Saltur con todos los inconvenientes que esto representa, porque hay un tramo sin asfaltar entre Saltur y Cayaltí, que comprende un camino rural.

Ante ello, Carlos Balarezo considera que debe tenerse en cuenta la autopista El Sol, un proyecto de envergadura que en nuestra región no lleva ningún avance, no sucediendo lo mismo con los tramos que se encuentran en Chicama (La Libertad) y Sullana (Piura), donde la concesionaria COVISOL sí ha efectuado avances considerables, pero del nuevo puente Reque, ni sus cimientos se asoman.

“Aquí tiene que ver el gobierno regional, el cual tiene que coordinar y gestionar ante el gobierno central y Ministerio de Transportes para poder impulsar la construcción de la autopista”, observa Balarezo.

Volviendo al tema del actual puente Reque, Balarezo señala que las fracturas y fisuras que en los últimos meses se registraron, es debido a que no se le hace mantenimiento y no se controla el peso de los vehículos, ya que al no existir balanzas en los peajes, pasan sin el menor control camiones de gran tonelaje que sobrepasan el peso que resiste dicho puente, el cual es de tan solo 40 toneladas.

“Qué pasaría con un Fenómeno El Niño, siempre se dice que no va a suceder, pero está presente, como lo sucedido con El Niño Costero que no estaba pronosticado, el incremento de caudales del río Chancay podría hacer serias afectaciones”, indicó Carlos Balarezo, como exjefe regional del Indeci Lambayeque, agregando que el mantenimiento debería ser adecuado, pero la gran pregunta es quién lo hace, la empresa concesionaria o el Estado a través de Provias; esta situación no se ha definido claramente en el contrato de concesión.

El nuevo puente de la autopista El Sol

Para el decano del Colegio de Ingenieros de Lambayeque, Ciro Salazar Montaño, el puente Reque sigue siendo provisional, y hoy requiere la protección de sus estribos con un enrocado hacia aguas arriba para que pueda atenuarse el impacto que se genera cuando vienen grandes descargas y no se produzca una socavación de sus estribos.

Últimamente se deteriora la carpeta por desgaste, lo cual siempre requiere mantenimiento, pero esto pierde importancia relativa, porque está proyectado 800 metros aguas abajo, el nuevo puente de la autopista El Sol, una gran estructura que permitirá el paso de todos los vehículos pesados, uniéndose con la nueva vía de evitamiento hasta Mocce.

La autopista El Sol está paralizada desde el año 2014, aunque viene gestionándose desde el 2009. Lamentablemente hasta ahora el Estado no puede solucionar el problema del saneamiento físico legal y las servidumbres, ya que primero se planteó un trazo que pasaba por la ciudad de Reque, afectando a cien viviendas. Ante ello se presentó otra alternativa que tiene la anuencia de todos los actores, pero el acta se firmó el 7 de mayo del 2014 y hasta la fecha el Estado no reacciona.

Salazar Montaño sostiene que la inestabilidad política los ha detenido en las presiones, pues van a esperar unos días para retomar esta gestión y convocar al ministro, a fin de que agilice y tome una determinación para la conclusión de esta obra, concesionada a la empresa COVISOL, que viene cobrando peaje sin tener este tramo construido.

Esta vía descongestionaría todo el tránsito pesado en Chiclayo, toda vez que la actual vía de evitamiento está quedando muy limitada y congestionada.

“Once años han pasado y esto es un trofeo a la desidia, al desinterés, a la ineficiencia de los que nos han gobernado, cómo es posible que no se han dado cuenta que tenemos una obra paralizada, cuántas gestiones han pasado. Humberto Acuña durante ocho años y Yehude Simon por un año, hay que darles un premio por desidiosos”, observó el decano de los ingenieros, quien agregó que el gobernante regional anterior solo se dedicó a ser gobernador de su sede central. “Es un miope en política, no se dio cuenta que lideraba el desarrollo de obras en toda la región, mas no solamente de su sede central”, inquirió.

Asimismo, señaló que al actual gobernador Anselmo Lozano, le corresponde presionar por esta obra, que está considerada dentro de las 52 obras emblemáticas que tiene el gobierno; “pero si no nos preocupamos nosotros nunca se va a hacer, cuánto tiempo perdido, estamos hablando de 11 años que no hemos podido solucionar un pequeño tramo. Obviamente merece una atención especial de todas las autoridades y por eso estamos enarbolando esa bandera”, acotó Ciro Salazar.

Un plazo más

Una vez pase la actual crisis política, lo primero que hará el Colegio de Ingenieros será convocar al nuevo ministro de Transportes Edmer Trujillo. Ya han solicitado a Provias un informe de la situación real, pero el documento está demorando. “Por la inestabilidad política no se ha presionado. Sin embargo, si no hacen caso, convocaremos a todos los alcaldes, porque es solo cuestión de decisión política”, añadió.

En todo este “homenaje a la desidia” Provias tiene que entregar los terrenos saneados, en resumidas cuentas Transportes y Provias tienen la pelota en su cancha. Cabe resaltar además, que esta vía El Sol va desde La Libertad hasta Sullana, donde sí hay avances notorios, lo único que queda es este tramo en Lambayeque. “Nosotros somos los que hemos tenido autoridades ciegas, mucho viajan en avión y no por tierra, por eso no ven la realidad”, enfatizó Salazar.

Reconstrucción para el 2020, 21 o 22

De otro lado, el decano de la Orden de Ingenieros, informó que el puente Reque actual está considerado dentro del programa de reconstrucción, pero tampoco se ha hecho casi nada. Hay 80 millones para su reconstrucción, pero no se sabe si esto será para el 2020, 21 o 22; mientras tanto, si viene una gran descarga de agua, nuevamente se pondría en peligro su infraestructura.

En resumen, hay un puente Reque que se volvió definitivo y que hoy cuenta con 80 millones que no se usan para su reconstrucción. Y hay un gran proyecto de un nuevo puente comprendido dentro de la nueva autopista El Sol, que tampoco se ejecuta ni avanza en su saneamiento. De esto podría desprenderse que solo falta decisión política, la mano fuerte de un gobernador cuya obligación es luchar por esta obra tan importante para el desarrollo de la región, la cual está concesionada, pero no está culminada.

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