Mientras un grupo de pobladores se reunió el fin de semana con el gerente de la Empresa Prestadora de Servicios de Saneamiento (Epsel) y refieren que el proyecto de agua y alcantarillado de los 12 pueblos jóvenes de la carretera a Pomalca marcha por buen camino, hay otro sector que no confía y busca el apoyo de las autoridades regionales y municipales para que esta obra no se paralice.

 

El presidente del Comité Integral, Mario Ramírez Aguinaga, señaló que el viernes, el gerente de Epsel, Jorge Aspíllaga Valderrama, les explicó que todo va bien y no hay problema de ninguna clase, no hay retraso y es muy posible que en noviembre culmine la obra.

 

“Prácticamente está en un 90 %, es una obra grande, a veces hay interrupciones, pero la gente se encuentra trabajando; no vamos a permitir que nos estén engañando”, enfatizó.

 

Además, refirió que el gerente les cuestionó por qué llegaba tanta gente, cuando fueron solo 10 personas, teniendo en cuenta que son 12 pueblos jóvenes. “La gente está desconfiando por todas las paralizaciones que ha habido; prácticamente dos inicios con dos empresas, no vamos a permitir que nos engañen, como comité integral somos fiscalizadores”, enfatizó Ramírez.

 

Por su parte, el presidente de la Asociación de Comités Pro Obras de los Pueblos Jóvenes de la carretera a Pomalca, Elmer Pasapera Peralta, sostuvo que esta semana esperan tener una reunión con el gerente para ver en qué situación está la obra, cuál es el avance y si se ha pedido ampliación del plazo para el proyecto. “Hasta ahora no tenemos ningún pronunciamiento por parte de Epsel”, dijo.