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Publicado el Martes, 22 de Noviembre del 2022

Pesca artesanal en la región sigue en crisis

En la región algunos pescadores artesanales solo pescan una o dos veces por semana.
En la región Lambayeque se estima que existe un promedio de 2 mil pescadores artesanales, quienes actualmente siguen pasando por una difícil situación laboral desde el 2020, pues el problema persiste a causa de la pesca no controlada y la amenaza ambiental que produce el descenso de sus ingresos económicos.
 
Así lo indicó el dirigente de los pescadores artesanales de San José, Denis Fiestas, quien además afirmó que pese a la situación que enfrenta este sector de la región, para las autoridades locales, regional y nacional, son indiferentes.
 
“Desde que inició la pandemia hasta la fecha, el pescador artesanal de consumo humano directo no se llega a recuperar de la crisis económica y además nuestra situación se complicó por la escasez del recurso hidrobiológico y el mar no presta las condiciones”, declaró.
 
Prosiguió explicando que, para los pescadores artesanales les preocupa la falta de interés de las autoridades a pesar que conocen de la realidad, “por ejemplo, la actual ministra de Desarrollo Agrario y Riego, Patricia Ocampo Escalante, quien en dos oportunidades ocupó el cargo de gerente regional de Desarrollo Productivo en el Gobierno Regional (GORE) Lambayeque”.
 
“Las autoridades saben la dura realidad del pescador artesanal del departamento y no hacen absolutamente nada, sin embargo, cuando nosotros realizamos alguna protesta o medida de lucha de manera pública, se molestan y se sienten aludidos como si habláramos medias verdades”, acotó el dirigente.
 
Denis Fiestas refirió que actualmente los ingresos que deja la pesca artesanal han bajado en un promedio de 80%, “estamos pasando por una situación muy crítica y ni siquiera alcanza para cubrir con nuestras deudas pendientes”, mencionó.
 
PESCADORES ARTESANALES
Por otra parte, el dirigente de los pescadores, Denis Fiestas, señaló que, frente a esta situación en la región, varios compañeros se vieron obligados a buscar nuevas oportunidades de empleo en otras regiones.
 
“Algunos partieron a otros departamentos, ahora se encuentran en Pisco, Chimbote, para trabajar en la pesca de anchoveta, con la finalidad de percibir un ingreso seguro para sus hogares ya que por nuestra zona por ahora se pesca una o dos veces a la semana”, dijo.
 
“Las autoridades saben la dura realidad del pescador artesanal del departamento y no hacen absolutamente nada, sin embargo, cuando nosotros realizamos alguna protesta, se molestan y se sienten aludidos”
Denis Fiestas Llenque
Dirigente
 

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