La población de Olmos es rebelde al Covid-19 y lo demuestra con las fiestas que realizan, donde hay agresiones.
Los principales problemas que registra el distrito de Olmos son las denominadas ‘fiestas Covid’, prostitución, violencia familiar y abigeato.
“La Capital del Limón” cuenta con 24 integrantes de Serenazgo y un estimado de 38 efectivos policiales distribuidos en turnos, para atender a los 220 caseríos y 11 centros poblados, donde habitan más de 50 mil personas.
La policía cuenta con dos unidades móviles y el área municipal de seguridad ciudadana una camioneta y dos motos.
El jefe de Seguridad Ciudadana, José Nunura Soplapuco señaló que con la poca logística que cuentan tratan de llegar a todos los puntos, atendiendo al llamado de la población y la responsabilidad. “La lejanía entre los centros poblados impide llegar a tiempo a todos los casos, pero tratamos de llegar. Contamos con apoyo de las rondas”.
La municipalidad ha prohibido los eventos o fiestas durante la pandemia; sin embargo, la población es desobediente y participa sin cumplir los protocolos de bioseguridad.
AGRESIÓN
El personal municipal y la policía intervienen las fiestas, pero terminan siendo agredidos y las unidades móviles dañadas. Es por ello que ahora, han optado por intervenir antes de. Explicó que, por lo general, cuando se organizan bailes populares o reuniones, son alertadas con anticipación; entonces la intervención se realiza antes de la fecha.
“Cuando llegamos el mismo día, las personas están en otro nivel porque han consumido alcohol y optan por agredirnos”, comentó.
Asentamiento humano Alan García, anexo Valle Hermoso y otros son los lugares donde ocurre la mayoría de fiestas.
Se han detectado casos, donde los bares sirven como fachada para ejercer la prostitución informal, los cuales son clausurados y multados.
YA HAY EJECUTOR COACTIVO
La Municipalidad Distrital de Olmos ya cuenta con ejecutor coactivo, quien ejerce las acciones de coerción para el cobro de las multas que impone el personal de fiscalización.
En la víspera, el subprefecto de Olmos, Marcos Vidal Cornejo indicó que desde el año 2017 había solicitado a las autoridades que hagan cumplir el Reglamento de Organización y Funciones, así como el Manual de Organización y Funciones, donde se indica la contratación de un profesional.
Actualmente, el personal municipal registra la multa al administrado, paralelamente de un posible cierre del local. Además, la policía también puede colocar la infracción por incumplir los protocolos.
