Durante las últimas semanas y con el cambio de nivel de alerta en la región Lambayeque, las reuniones han ido aumentando.
Dos de los distritos donde las autoridades han realizado varios operativos han sido Olmos y José Leonardo Ortiz. No solo hallando las denominadas ‘fiestas Covid’ sino el ejercicio de la prostitución.
Las autoridades policiales, fiscales y municipales han cumplido con la intervención, pero los casos son reincidentes, sin importar el contagio Covid-19 durante esta pandemia.
En el asentamiento humano Alan García del distrito de Olmos, las autoridades encontraron un local donde se desarrollaba una fiesta con presencia de 800 personas y orquesta musical incluida.
El personal de serenazgo, juntas vecinales y rondas campesinas, área de Fiscalización y otras autoridades, al intervenir fueron agredidos con piedras por los asistentes que se refugiaron en las faldas del cerro.
Simultáneamente se desarrollaba otra fiesta en el sector Motocross donde se incautó el equipo consola y se trasladó al organizador a la comisaría para las sanciones correspondientes de acuerdo a lo establecido en el último Decreto Supremo 131-2021-PCM.
Durante la intervención, tres agentes de seguridad ciudadana fueron golpeados por las piedras de los enardecidos concurrentes. La unidad de serenazgo también sufrió daños.
PROSTITUCIÓN
El Ministerio Público de Lambayeque informó sobre la intervención que realizaron en las calles 7 de Enero y 8 de Octubre del cercado de Chiclayo, donde se intervino a personas que ofrecían servicios sexuales.
Estas personas carecían de su documentación de identidad, por lo que fueron trasladadas hasta la comisaría del sector.
Las actuaciones también continuarán en los establecimientos dedicados a la venta de bebidas alcohólicas, donde se incumple todo tipo de protocolos de bioseguridad.
En tanto, la subprefecta de Chiclayo, Cynthia Cervera Arrascue, señaló que el reporte indica que no hay un aumento considerable de fiestas que puedan alarmar, pero se debe continuar con el trabajo, ya que no faltan quienes no acatan las normas.
“Tenemos que continuar con el trabajo porque habrá siempre personas que no acaten las normas, pero eso no quiere decir que hubo un desborde. No hay que bajar la guardia”, aseveró.
OLMOS NO PUEDE MULTAR
La Municipalidad Distrital de Olmos carece de un ejecutor coactivo, que permita el cobro y proceso administrativo al colocar una multa.
El subprefecto distrital, Marcos Vidal, indicó que desde el año 2017 ha solicitado a las autoridades que hagan cumplir el Reglamento de Organización y Funciones, así como el Manual de Organización y Funciones, donde indica la contratación de un profesional.
En todo caso, los operativos que realizan la Policía y Fiscalía con multa incluida a quien desacate las normas, terminan siendo un saludo a la bandera, ya que la comuna no puede cobrar.
“Por ejemplo, ayer han cerrado locales, pero hoy reabren. Les colocan el cartel de clausurado, pero al no existir el órgano que pueda cobrar y sancionar queda en nada”, acotó.
Sostuvo que en ocasiones anteriores ya han tenido problemas judiciales, pues clausuraron un local y luego fueron denunciados. Demandó al gobierno local que asuma su responsabilidad administrativa y que los operativos se cumplan de acuerdo a norma.
“Si colocan una multa no hay quien cobre, no hay quien haga ejecutar como en Chiclayo que existe el SATCh”, dijo la autoridad antes de cumplir su periodo de vacaciones.