“De hecho, el estar pasando de niveles de alto a muy alto y Dios no quiera a extremo, nos afecta, pero ya los empresarios somos resilientes y estamos adaptados, ni bien sale una nueva norma todos nos informamos, actuamos e intentamos cumplir la norma”, sostuvo el directivo de la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines (Ahora) Lambayeque, Dante Díaz Vásquez.

 

Anotó que los agremiados ya saben que si tienen que cerrar o abrir deben cumplir, igualmente cuando se trata de cambiar aforos, porque se han tenido que adaptar a la nueva realidad y están preparados.

 

“Lo que sí invocamos a la población es que cumpla los protocolos de seguridad, cuidemos mucho nuestra burbuja social, las personas con quien convivimos, salir a restaurantes con el grupo de tu familia con las personas con quienes siempre nos relacionamos para reducir los contagios. Si todos cumplimos en conjunto no vamos a tener que cambiar nuestro nivel de alerta en la región”.

 

Precisó que al reducir el nivel de riesgo de muy alto a alto, se permite a los restaurantes abrir sus zonas internas y lo más importante el acceso a las playas, que va a ayudar a que la economía del sector turístico se pueda ir reactivando desde el sector privado, recuperándose un poco y les parece correcto.

 

Refirió que el Estado peruano realiza esa clasificación en base a indicadores como nivel de contagios, número de decesos, acceso a camas UCI, reducción del nivel de contagios, entre otros aspectos.

 

No obstante, Díaz Vásquez lamentó que el sector informal no sea supervisado por el Estado, ni controlado por los entes competentes, siempre incumplen las normas y por ahí es donde se generan los focos de contagio. “Lo ideal es que el Estado peruano y el Gobierno Regional puedan ir buscando el modo de formalizar este sector”.

 

Pimentel, Puerto Eten y otros distritos van a mejorar su economía, porque existen muchos negocios que están a orilla de playa y lo bueno es que nuestro litoral tiene zonas muy amplias; “lo importante es que las municipalidades cumplan su rol y verifiquen que se mantenga el distanciamiento social, los aforos y no permitan aglomeraciones”.

 

Opinó que la población lambayecana ya está consciente de evitar las aglomeraciones y eso va a ayudar a mantener la clasificación para no volver a una cuarentena estricta.

 

Además, dijo que las municipalidades deben buscar las alianzas público privadas con sus gremios locales y regionales, para que ayuden a mantener estos aforos, es la única forma, porque los municipios no tienen capacidad de hacerlo. “Hay que ser realistas, si el sector privado ayuda, podríamos reducir los contagios y poder trabajar tranquilos”.

 

Finalmente señaló que todos tenemos que cumplir el rol de informar las medidas, que se cumplan cosas tan sencillas para mantenernos en nivel alto o reducir a nivel moderado que es lo que desean no solo los empresarios sino la población en general.