La bicicleta en estos tiempos de pandemia ha contribuido muchísimo como medio de transporte por diversas razones; en principio, porque ayuda a mantener nuestra economía y nos hace ahorrar dinero, pues no necesita combustible, y ahora en el confinamiento, nos permite poder mantener la distancia social y reducir el contagio del coronavirus.

 

Pero eso no es todo, a la par que nos movilizamos hacemos ejercicio mientras pedaleamos y esto sin duda nos ayuda a eliminar el estrés y tener un poco más de estabilidad mental.

 

La coordinadora del colectivo Masa Crítica Chiclayo, Miriam Neyra Lizana, resalta que también es un gran aliciente como tema deportivo o recreativo; quién no quiere salir los fines de semana a conocer lugares bonitos. En general los beneficios de la bicicleta son múltiples.

 

Amantes de pedalear, pero sobre todo conscientes de los nuevos tiempos, un grupo de jóvenes chiclayanos notó la importancia de impulsar este medio de transporte y a través de Masa Crítica crearon la “Bici escuela”, donde cada sábado de 4:00 a 6:00 de la tarde, alrededor de 20 voluntarios no solo enseñaban a manejar bicicleta en el parque de Patazca, sino que impartían conocimientos de mecánica y tenían planeado descentralizarlo en varios puntos de la ciudad, como el Paseo Yortuque, Parque Infantil y otros.

 

Lamentablemente vino otra vez el confinamiento y dado que estamos en una situación de alto riesgo, la actividad se postergó. Más de 30 personas cada fin de semana recibían este beneficio gratuito, en su mayoría niños y mujeres mayores.

 

Hoy ven la manera de hacer Bici escuela de manera virtual y ya se han reunido para implementarlo, el programa está en construcción e implicará mecánica, pero sobre todo el reglamento de la Ley de la Bicicleta que entrará en vigencia en junio de este año y hay que estar al día con los requisitos, implementos, sanciones y multas, que de alguna manera el ciclista cotidiano urbano debe conocer para seguir pedaleando por las calles.