Las nuevas medidas de restricción que empezaron a aplicarse desde el 15 de enero, tras reportarse una segunda ola de covid-19 en el Perú, traerán consecuencias desfavorables para el comercio y sector construcciones en la región Lambayeque, señalan expertos. Se habla, incluso, de que podría afectar el empleo.

 

“Hay sectores, no todos, que se ven afectados, donde la parte de operaciones es de noche y están siendo duramente perjudicados. Pero para la mayoría que labora por la mañana, a ellos no se les ve las secuelas de algún efecto negativo en su empresa”, señala el presidente de la Cámara de Comercio en Lambayeque, Carlos Burgos Montenegro.

 

Burgos Montenegro indica que estos sectores son alimentos y comercio. En el caso del primero, menciona a aquellos que hacen entregas a domicilio, principalmente de cenas durante la noche. Que como efecto del toque de queda se han visto restringidos en sus labores.

 

“Normalmente solían atender hasta las nueve o diez de la noche. Pero cortarles de pronto desde las siete, no me parece lo correcto. Debe haber una flexibilidad, porque la parte operativa cumple los protocolos, y la entrega es un mínimo riesgo”.

 

Indica que los centros comerciales y supermercados, que en épocas normales atienden hasta las diez u once de la noche, es un sector que también se ve afectado con las medidas decretadas por el Gobierno.

 

“Que no sea (el toque de queda) desde las siete de la noche sino desde las nueve de la noche”.

 

Burgos Montenegro sostiene que dichas modificaciones en el horario del toque de queda sería prudente para que la economía no caiga. “Porque los empresarios de lo bien que se estaba retomando, comienzan a generar despidos y eso afecta el presupuesto en la familia”.

 

Por ello, si bien la pandemia de Covid ha ingresado en una segunda ola, no considera recomendable prorrogar las medidas de restricción. Insiste en que debe haber flexibilidad en los horarios para facilitar el movimiento en algunos negocios que se desarrollan en horarios de noche.

 

Para Antonio Rabanal Rosales, de la Cámara Peruana de la Construcción – Capeco Lambayeque, más allá de las complicaciones que tienen los trabajadores de la construcción con la presencia de esta pandemia, señala que las consecuencias de las medidas dictadas por el Gobierno nacional para evitar el incremento de contagios de Covid-19, se podrán ver las próximas semanas.

 

Indica que el impacto se verá con mayor fuerza en el sector privado. “El trabajo remoto se está manteniendo, como los cuadros gerenciales y técnicos. Algunos no están haciendo presencial y ello ocasiona retraso en las obras”, señala.

 

Dice que la eficiencia en la ejecución de las obras disminuye, porque no hay la continuidad de la supervisión o acompañamiento en la gestión de proyectos. “Por el lado de eficiencia sí afecta bastante”.