A partir de mañana el cementerio El Carmen de Chiclayo abrirá sus puertas, luego de permanecer cerrado desde el mes de marzo ante la llegada de la pandemia del covid-19.
El presidente de la Sociedad de Beneficencia de Chiclayo, Juan José Salazar García, informó que durante una semana se podrá evaluar el comportamiento del público en el camposanto, para definir sus horarios y capacidad.
No obstante, dejó en claro que conociendo la cantidad de personas que acostumbran llegar al cementerio durante los días 1 y 2 de noviembre, en que se conmemora el Día de los Difuntos y Todos los Santos, se decidió que El Carmen cerrará sus puertas.
En años anteriores llegaron hasta cinco mil personas por estas fechas, pero por la pandemia no se puede exponer a la población.
Desde mañana, serán dos o tres personas por familia que pueda ingresar, cada una usando adecuadamente mascarilla, protector facial y manteniendo el distanciamiento. Además, se controlará la temperatura y desinfección de manos y calzado.
Cada familia podrá permanecer durante 30 minutos en el lugar, tiempo suficiente para rezar, cambiar flores y realizar la limpieza de las lápidas.
El Carmen tiene un aforo permitido de 20 mil personas en época normal, pero para evitar la propagación del virus, se estableció que solo se permitirá el 5 %; para ello se destinará mayor personal que estará ubicado en el ingreso para medir la temperatura y desinfección, también estará presente en los cuarteles, puesto que se busca no generar aglomeraciones.
“El martes iniciamos con la reapertura del cementerio y vamos a ir controlando la capacidad. Durante esa semana definiremos las medidas a emplear, pero sí está decidido ampliar los horarios, atender en doble horario y todos los días para evitar grandes cantidades de personas”, expresó.
Censo
Señaló que en el Carmen reposan los restos de 60 mil personas, pero teniendo en cuenta la antigüedad y destrucción de algunos nichos para pasar los restos fósiles a osarios, es posible que el número haya cambiado. Es por ello que se busca un convenio con una universidad para que sincere la cifra y se conozca un número exacto.
