Transportistas de servicio público de pasajeros presentan propuesta para combatir la informalidad, pero no reciben respuesta. En tanto, la reactivación del sector es lenta y hace prever que muchos conductores no retornarán al servicio.
La disposición para que el sector de Transporte público de pasajeros en las modalidades colectivos y taxis, sigue en marcha. Sin embargo, los transportistas formales se encuentran no solo con el lento avance del retorno a sus actividades sino también de la competencia informal.
Jorge Andonayre Hernández, presidente de la Central de Colectivos de Lambayeque, señala que en varias oportunidades se ha tocado el tema de la informalidad con los funcionarios de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCh); sin embargo,
argumentan que no se pueden ejecutar acciones para combatirla por la falta de recursos económicos para contratar personal y efectuar las fiscalizaciones. Y también, porque debido a la pandemia el recurso humano edil se ha reducido a menos del 50 por ciento.
Frente a esta situación han hecho una contrapropuesta desde el sector de Colectivos. Y es que tras acondicionar los vehículos con los protocolos de seguridad, piden que se les permita llevar tres pasajeros, con la finalidad de que las tarifas no se disparen como ocurre con el informal, donde no hay control”.
“La oferta es que se nos permita llevar los tres pasajeros para hacer frente a la informalidad”, indica. Es decir, con un mayor número de pasajeros las tarifas se reducirían; sin embargo, la propuesta no ha sido aceptada.
“Eso no es contradecir la normativa nacional. Al interior del país el mismo decreto supremo autoriza y faculta a las municipalidades dentro de sus facultades (…) a tomar como referencia la necesidades que puedan haber.
En tanto, tras la reactivación del sector Transporte de pasajeros, de un total de 4 500 unidades de colectivos, solo el 20% ha retornado a sus labores. Pero la situación se complica cuando del total de usuarios, solo el 30% en la actualidad hace uso de estos vehículos.
El presidente de la Central de Empresas, Asociaciones y Operadoras del Servicio de Taxis de Región Lambayeque, Juan Vásquez García sostiene que al actual alcalde poco le interesa la situación del sector Transporte.
“En la municipalidad de Chiclayo casi todo es informalidad, mas aun cuando el alcalde (Marcos Gasco Arrobas) no se reúne con personas que son las indicadas (dirigentes de transportes)”, sostiene.
Refiere que para combatir la informalidad en el sector taxis se necesita un reempadronamiento, para determinar cuántos vehículos formales existen en la provincia de Chiclayo, “porque su data de ellos no es más de doce mil, pero afuera circulan más vehículos”.
Refiere que por lo menos unas 34 mil unidades se dedican al servicio de taxis en Chiclayo, aunque actualmente en cuanto a los formales, solo han logrado activar un 35% de transportistas de este sector, debido a que algunos han fallecido, otros son personas vulnerables y hay quienes, ante la falta de pasajeros, se han inclinado por otras actividades económicas.
Cuestiona que si bien se dispuso que en un inicio solo trabajarían el 20 % de cada flota vehicular de las empresas registradas, pero adaptándose a los protocolos sanitarios; sin embargo, “la municipalidad no ha sacado ninguna ordenanza que trate de reglamentar lo que el gobierno central señaló”, precisó.