Por disposición del Gobierno Central, el 1 de julio se levantó la cuarentena en algunas regiones del país, entre ellas Lambayeque. No obstante, muchas autoridades se mostraron en desacuerdo por temor a un nuevo rebrote de casos y fallecidos a causa del Covid-19.

 

El presidente de la Federación Médica de Lambayeque, Paúl Larrea Alvarado, manifestó que mientras no se descubra la vacuna contra el nuevo coronavirus, existirán ondas endémicas recurrentes. Es decir, la pandemia tendrá picos bajos y picos altos.

 

“Tras culminar el aislamiento social obligatorio, la primera onda podría registrarse en la tercera semana de julio. Sin embargo, la preocupación siempre será la intensidad con que esta se presente. Ello está en función de cosas simples, como el respeto a los aforos, el uso de protectores faciales en espacios hacinados, manejo de transporte interprovincial y demás”, explicó.

 

Asimismo, subrayó que el Ministerio de Salud (Minsa) cumple un rol muy importante, debido a que debe fortalecer el primer nivel de atención y llevar a cabo la vigilancia epidemiológica en los principales grupos de riesgo de la región. De lo contrario, el Estado volverá a tomar decisiones drásticas en los departamentos más afectados.

 

Hasta el viernes 3 de julio, Lambayeque reportaba 14 011 casos positivos (107 más que el día anterior) y 1 042 fallecidos (22 más que el día anterior). Además, 6 481 personas recibieron alta epidemiológica y 1 068 alta hospitalaria en EsSalud, de acuerdo a la Sala Situacional de la Gerencia Regional de Salud (Geresa).

 

 

Paúl Larrea manifestó que, en estos más de 100 días de crisis sanitaria, ha quedado demostrado que, en Lambayeque, falló el tema comunicacional. Uno de los motivos sería porque la Geresa nunca informó de manera correcta las acciones que realizó para hacer frente al coronavirus.

 

Por ejemplo, se indicaba que existían brigadas de salud, pero se desconocía en qué sectores se encontraban trabajando. De igual forma, no se explicó a la población respecto a las directivas sanitarias del Minsa para el manejo de cadáveres, entre otros.

 

Por otro lado, el presidente de la Federación Médica, subrayó que en medio de una pandemia no es recomendable realizar cambios de los representantes del sector Salud. Calificó como una decisión ‘intempestiva’ la salida del gerente regional, Jorge Ordemar Vásquez.

No obstante, puntualizó que Víctor Echeandía Arellano tiene un gran reto, porque la pandemia aún no ha terminado. “Mi pedido al actual gerente es que convoque a todos los actores involucrados para que se puedan tomar medidas oportunas”, culminó.