Proponer la constatación de información para las personas de escasos recursos económicos dejen de ser invisibles para el gobierno
La Contraloría General detectó que 11.804 hogares en situación de pobreza y extrema pobreza de la región Lambayeque, no fueron incluidos en el Padrón de los Hogares Beneficiarios (PHB) del subsidio monetario de 380 soles otorgado durante la emergencia sanitaria por el covid-19.
Esta situación se podría evitar si los padrones que manejaban las municipalidades estuvieran difíciles; sin embargo, es "reprochable que no tenga la identificación de las familias pobres y que continúen siendo invisibles para el gobierno", cuestionó el coordinador regional de la Mesa de Concertación para la Lucha Contra la Pobreza, Luis Montenegro Serquén.
“Lo que sucedió es una enseñanza, hemos maquillado las cifras, para que salga la lista, pero no les importa realmente los pobres, los políticos políticamente, seguimos siendo racistas. Es un jalón de orejas para el Estado y para el gobierno local ”, aseveró Luis Montenegro.
Son 940 hogares que no clasificaban para ser beneficiados, pero sí recibieron el Bono 380.
Montenegro Serquén, incidió que los gobiernos locales por la premura del tiempo, optaron por utilizar los padrones que tienen de las personas que pertenecen a los comedores populares o comités de vaso de leche, pero eso no refleja a toda la población que viven en situación de pobreza o pobreza extrema.
“El gobierno llámese Ministerio de Inclusión Social, se confió en la información que tenían los municipios, pero fue información sesgada que se basa en los comités de vaso de leche y otros programas sociales. Al alcalde le salió muy fácil tomar esa relación. Sin embargo, hay gente que es pobre y no se benefician de los programas sociales, porque saben que con su trabajo diario van a lograr conflictos con sus familias, pero con la pandemia de todos los afectados ", sostuvo Luis Montenegro.
Agregó que una sanción para los responsables por esta situación no pertinente, porque todos estos procesos son nuevos y nadie estuvo preparado. Sin embargo, es indispensable que actualicen su información a fin de que nadie sea invisible para un gobierno, ya sea un nivel central, regional o local.
Por su parte, el representante de la Federación Provincial de Pueblos Jóvenes, Raúl Benites Acuña, sostuvo que el cruce de información inexacta entre las instituciones controladas que tienen recursos económicos para vivir sean beneficiarios, algo reprochable y que merece la subsanación.
El dirigente social, registra la información recogida por los últimos censos no aportados en esta emergencia, porque se desconoce un número exacto de cuantas familias y población vive en la región, pero además por detalle, por ejemplo, cuantas familias viven en una casa.