Las autoridades de la institución educativa particular Santa Ana abrió este jueves sus puertas a los alumnos como todos los días, pese a que el mandatario anunciara que no habrá clases hasta el próximo 30 de marzo.
Al respecto, la promotora del plantel, Lina Guerrero, refirió que los estudiantes ingresaron a las aulas solo para que reciban las tareas que deberán desarrollar en sus casas.
En ese sentido, indicó que la medida del Ejecutivo se trata de una suspensión de 12 días de clases y, no es un periodo vacacional, debido a lo cual, es indispensable la entrega de tareas.
“Estamos ingresando para darles tareas, para ver qué van a hacer (los alumnos) porque no son vacaciones”, remarcó la promotora.