Un grupo de padres de familias y escolares de la Institución Educativa Jesús Alfonso Tello Marchena, ubicado en el centro poblado Cojal del distrito de Cayaltí, llegó ayer hasta el frontis de la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) de Chiclayo para protestar en contra de la reducción de docentes que tendrá el nivel primario de este plantel.
“El Estado antes nos ha quitado a nuestro auxiliar de educación, nuestro personal de servicio, y ahora nos quieren quitar una plaza docente del nivel primario. Eso significa que uno de los profesores tendrá que enseñar cuatro aulas; lo que va a conllevar el atraso de la educación de nuestros hijos”, reclamó el padre de familia.
Con pancartas, arengas y megáfono en mano, los manifestantes exigieron se cumpla con el compromiso hecho el año pasado por las autoridades de UGEL Chiclayo, quienes, aseveró, “prometieron que no habría reducción en el número de docentes”. Señalaron que es responsabilidad del director de la referida UGEL y el mismo gerente de Educación dar una solución a esta problemática.
SE PRONUNCIA
Ante el clamor de los padres, este medio se comunicó con Ángel Salazar Piscoya, titular de la UGEL Chiclayo, quien manifestó que “el Minedu está haciendo un proceso de racionalización del llamado reordenamiento territorial que es un ‘desmantelamiento’ de las plazas de la zona rural; entendiendo (el Minedu) de que en esas zonas hay pocos maestros y no los necesitan; un criterio que afecta”.
Salazar Piscoya manifestó que frente a este actuar del Ejecutivo, están elevando la documentación pertinente para ejercer el reclamo, pero, además, indicó que en su viaje de la próxima semana a Lima una de las solicitudes al titular del sector será no vulnerar las plazas de la zona rural.