El virtual congresista de la República, Humberto Acuña Peralta, sostuvo que no busca enfrentamientos, sino trabajar por el país con unidad, concertación y diálogo. Esto como respuesta a los cuestionamientos que realizó en su contra el gobernador Anselmo Lozano Centurión.

“No voy a contestar al señor Anselmo, estoy hablando de una nueva formación política, no de enfrentamiento, de dime y diretes, estamos en un país democrático y no tenemos ningún problema de reunirnos porque por encima de lo que diga esta lo mejor para Lambayeque”, aseveró el también exgobernador regional por 8 años.

Respecto a la eliminación de la inmunidad parlamentaria, Acuña Peralta precisó que de ser el caso, apoyará contundentemente la eliminación de la inmunidad parlamentaria. Hay que indicar que el exgobernador es investigado en la Fiscalía por diversos casos y hace poco fue condenado a tres años de pena suspendida en su ejecución por el delito de cohecho. Fallo al que apelado.

“Yo no busco inmunidad por las investigaciones y procesos que tengo pendientes, si eso hubiera sido así hubiera buscado postular por 5 años, no por año y medio. Jamás responderá a temas judiciales y sí votaría para desaparecer la inmunidad parlamentaria”, acotó tras agregar que Alianza para el Progreso tampoco buscará alianzas con otras organizaciones políticas.

Acuña Peralta, realizó ayer una visita protocolar al alcalde provincial, Marcos Gasco, con quien coordinó diversas necesidades (obras) de Chiclayo, como el proyecto del drenaje pluvial, saneamiento integral y seguridad ciudadana.

Además, dijo que está pendiente atender e impulsar el complejo Ventarrón, ubicado en el distrito de Pomalca y la deuda social que tiene Chiclayo.

Acuña Peralta mencionó que a nivel regional está pendiente el Terminal Marítimo de Lambayeque, que se impulsa desde el año 2011.

“El presidente Martín Vizcarra se comprometió con Lambayeque, indicando que iba a ayudar para contar con un terminal marítimo, hay que hacerle recordar su compromiso”, aseveró.

Por último, dijo que este proyecto necesita de la voluntad política y puede ejecutarse a través de una iniciativa estatal o necesidad privada.