Después del fenómeno de El Niño del 2017, Lambayeque fue una de las regiones más golpeadas económicamente, porque muchas familias lo perdieron todo. En el 2018, la pobreza estaba en 21.7%. No obstante, en la actualidad ha disminuido a 17%.

“Es decir, hoy día tienen un trabajo y gozan de buena salud, pero mañana esos beneficios pueden terminarse, porque no existe un contrato laboral de por medio o el sueldo que perciben no les alcanza para costear los gastos de una enfermedad”, sostuvo el coordinador de la Mesa de Concertación de la Lucha Contra la Pobreza (MCLCP), Luis Montenegro Serquén.

Mencionó, que según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), una familia es considerada pobre cuando recibe un sueldo mensual no mayor a 1500 soles. Sin embargo, añadió que 1600 soles o 1800 soles tampoco son suficientes para cubrir las necesidades de un hogar de cuatro o más integrantes.

“No por ejemplo, si el padre que es el que sustenta su casa, es víctima de la inseguridad ciudadana y le roban su única fuente de trabajo, su mototaxi”.

Montenegro Serquén, manifestó que en esta situación se encuentran cientos de agricultores de la región Lambayeque, que no han podido mejorar su economía por las plagas. Asimismo, las personas a quienes no les cancelan a tiempo en su centro de trabajo y tienen que endeudase para solventar económicamente a sus familias.

El coordinador de la MLCP, también hizo hincapié en el sueldo de los jubilados, que en los últimos años no ha tenido ningún avance, pero el costo de vida sí ha aumentado. “Por ello, siempre digo que hablar de pobreza es introducirnos en un submundo, que todos sabemos que existe, pero a veces lo miramos de reojo”, acotó.

El 30% de la población que vive en el equilibrio entre la pobreza y no pobreza, se encuentra tanto en la zona urbana como la rural. No obstante, por el volumen Chiclayo, José Leonardo Ortiz, La Victoria, son los distritos más afectados. No obstante, si nos trasladamos a Mórrope, Salas, Cañaris e Incahusi, se pueden identificar un número menor de la población, pero la problemática es mayor.

RESILIENCIA

Montenegro Serquén habló sobre una estrategia que está impulsando el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social. Se trata de la salida permanente de la pobreza, que consiste en generar mecanismos para que las personas que vivían en situación de vulnerabilidad se empoderen y no retrocedan, sino continúen hacia adelante.

“Es buscar las formas de generar resiliencia en los pobres, que es la capacidad de generar su propio desarrollo”, agregó.

El coordinador de la MCLCP, precisó que las autoridades nacionales, regionales y provinciales, también tienen que prestar atención a las víctimas del fenómeno de El Niño del 2017 en la región Lambayeque, porque en Íllimo aún existen familias que están buscando un lugar donde vivir.

En ese sentido, resaltó que los municipios distritales, provinciales y la región tienen que elaborar o fortalecer sus planes de desarrollo concertado, a fin de prevenir antes cualquier emergencia o desastre natural. “No podemos dejar a ninguno de los 38 distritos de Lambayeque abandonados, tenemos que trabajar por todos ellos”, concluyó.