El cambio de clima que en los últimos días se registra, podría originar una serie de enfermedades para las cuales debemos estar preparados. Además de los resfríos, el aumento de las temperaturas puede ocasionar problemas digestivos y enfermedades provocadas por vectores, sin descuidar la protección frente al incremento de los rayos solares.
Estos cambios bruscos provocan que muchas personas que ya vienen con problemas de tipo respiratorio propios de la etapa de invierno, vean agravados sus procesos debido a que por las tardes el frío los sorprende con poco abrigo.
Además, precisó que vendrán los problemas de tipo digestivo, porque muchos consumen líquidos que no son tan higiénicos; por la sed toman chicha morada, limonada y otras bebidas en la calle, compran a los ambulantes sin la garantía que esto precisa. Tampoco pueden tomar gaseosas en abundancia por el problema de obesidad y otros.
Recalcó que el agua es recomendable, pero debidamente hervida en casa, porque el agua puede estar contaminada. “Se supone que el agua es potable, pero la sugerencia siempre es por favor hervir o clorar el agua que consumimos o que tomamos de los caños, siempre es bueno en la etapa de verano”, subrayó.
Problemas dermatológicos
El galeno refirió que otros problemas son los dermatológicos que provoca el sol intenso y recomendó que aún cuando no haya mucho sol, es necesario protegerse con bloqueador porque el cáncer de piel, que antes no era tan abundante, hoy se está incrementando.
“Tengan en cuenta que la exposición no te genera el cáncer el otro año, van a pasar años en los cuales va a brotar el cáncer y hay que usar gorra o sombrero”, precisó.
Vectores del dengue
El decano del Colegio Médico indicó que lamentablemente el verano trae consigo la presencia de vectores, y los vectores son los insectos, entre ellos nuevamente el Aedes Aegypti que trasmite el dengue.
Recordó que este año nuevamente hemos tenido dengue, en mayor proporción en Ferreñafe, mientras que el año pasado fue Tumán.
“Cada año el lugar donde se presenta el problema serio está variando, pero el verano lo trae, el calor favorece el crecimiento del zancudo aedes y el invierno lo mantiene aletargado”, explicó.
Resumió e invocó a la población que tenga cuidado con la piel y su exposición al sol, así como con los insectos o vectores. También mucho cuidado con el agua y los alimentos que consumen, los cuales deben estar calientes y no fríos, mientras que el agua debe ser hervida o clorada.
Utilizar repelentes o mosquiteros cuando vean zancudos en la casa. Para la piel usar bloqueador solar y protectores como sombreros y gorras.