El cementerio El Carmen de Chiclayo tiene 12 pabellones libres para una capacidad total de 5 mil nichos, estiman que se podrán sepultar muertos hasta los próximos dos a tres años. Es por eso que se busca la construcción de osarios, donde irán los restos óseos de los cuerpos ubicados en pabellones con más de 100 de antigüedad.
“Los pabellones serán reconstruidos, para eso buscamos la reubicación de los restos óseos. El año 2020 deben iniciar los trabajos”, indicó.
El Carmen al quedar con muy pocos pabellones, se busca la construcción de un cementerio. Por ahora la opción es un terreno de 30 hectáreas ubicado carretera a Capote, pero la propiedad falta ser saneada.
El funcionario recordó que en el año 2018, durante la gestión de David Cornejo Chinguel como alcalde de Chiclayo, la Beneficencia compró un terreno de tres hectáreas ubicado en Pimentel, por el cual pagó el monto de 4 millones de soles, pero con varias irregularidades, que ahora son investigadas por el Ministerio Público.
“Se compró un terreno en una zona que no es la más adecuada, no hubo tasación de parte de la Beneficencia, solo del vendedor, no se consultó a la municipalidad distrital como está calificada la zona, entre otros puntos que demuestran que lo único que hubo es el interés de la Beneficencia para comprar a pesar de varias advertencias”, comentó.
En ese sentido, el Ministerio Público tomó cartas en el asunto y está investigando para hallar a los responsables de la compra del terreno.