La Unidad Técnica de Vigilancia y Control de Zoonosis trabaja en el control de dos componentes como es la rabia y la peste bubónica.

La responsable de esta área, Carmela Cabrejos Ugaz indicó que en el año 2018 se presentó dos casos en el centro poblado de Humedales Bajos ubicados en Salas, uno de los pacientes falleció.

Como parte de la intervención sanitaria se utiliza unas jaulas de tipo Toma Hawk y Sherman para la captura de roedores vivos a quienes se les retira las pulgas, esas se someten al Laboratorio Referencial de Salud para detectar si tiene la bacteria de yersinia pestis.

Además, se realiza constantes reuniones de información con el personal de salud, autoridades y población.

“Esperamos que en un mes, se cuente con los resultados de los informes para saber si hay peste bubónica en las zonas intervenidas”, acotó. Asimismo agregó que para este año se ha programado 4 vigilancias epidemiológicas.

La peste bubónica es una infección bacteriana grave transmitida principalmente por las pulgas. El organismo que provoca la peste bubónica, yersinia pestis, vive en los pequeños roedores que se encuentran comúnmente en las zonas rurales.