Ayer, el Ilustre Colegio de Abogados de Lambayeque (ICAL) se convirtió en un ‘campo de batalla’, por lo que fue preciso la intervención de la policía.

 

Todo ocurrió cuando se desarrollaba la sesión del Consejo Directivo, donde se solicitaría la vacancia del decano, José María Balcázar Zelada.

 

Según los abogados, el máximo representante de su orden profesional, no participó en la sesión, pero luego de haber iniciado, este ingresó junto con el director de Ética, Elmer Fustamante Gálvez para interrumpir y generar desorden. En medio del enfrentamiento, la directora de Economía, Rosa Pizarro Piscoya, dijo haber sido agredida.

 

“Hemos estado sesionando y no toleran ser vacados, el decano me empujó y el director de Ética me ha torcido la mano, la tengo hinchada. Es la primera vez que sufrimos agresión física porque verbal siempre. Ahora con la vacancia, el señor Yuri Díaz asume como decano”, comentó.

 

El director de Defensa Profesional, Edwin Roque Castillo, expuso los motivos de la solicitud de vacancia.

 

“El decano tiene bastantes inasistencias injustificadas a las sesiones, ya ha sido notificado por la vía notarial y por la vía regular, pero escudándose en el cargo han pretendido sancionar a nuestros colegas que estamos denunciando las irregularidades. También ha contratado en Tesorería a una investigada por el fiscal Juan Carrasco en Criminalidad Organizada; sin embargo está trabajando aquí, al igual que su hermano”, refirió.

 

Agregó que las contrataciones deben darse de manera regular a través del Consejo Directivo. A esto mencionó que desde el mes de mayo no está ingresando dinero a las cuentas del Colegio Profesional.

 

Todo este problema conllevó a que intervenga la Policía y sean conducidos hasta la Comisaría César Llatas, el decano José María Balcázar y Elmer Fustamante, además de la supuesta agredida Rosa Pizarro para esclarecer los hechos.

 

En tanto, el Consejo Directivo continuó sesionando y por mayoría (10 directivos) lograron aprobar la vacancia de Balcázar Zelada.

 

El pastdecano, Carlos Martínez Oblitas, invocó a todos a la tolerancia y calma, puesto que está de por medio la imagen institucional del Ilustre Colegio.

 

“Decirles que los problemas no se resuelven con la fuerza, sino con el diálogo y cordura, aquí no gana ni uno ni el otro, sino que se pierde como institución. Queremos que el colegio marche por una zona de tranquilidad y que el servicio central que es prestar el servicio a los abogados debe estar presente”, acotó.

 

Agregó que en julio del 2022, el ICAL cumplirá 100 años de creación. “El colegio es una institución madura de mucho prestigio, es un ente rector, hay que llamar a la firmeza por la imagen institucional que representa, sean cual fueran las discrepancias deben ceder las partes”.

 

Los abogados están preocupados por lo que está ocurriendo en el Colegio Profesional, por lo que piden a ambas partes que reflexionen.

 

Cuando era conducido por la policía a la comisaría, el director de Ética, Fustamante Gálvez negó haber agredido a alguien; mientras que el decano Balcázar Zelada, dijo que había una investigación y que apoyaría en las diligencias.

 

Luego a través de las redes sociales, se informó que tanto Yury Díaz Jaime y Rosa Pizarro están suspendidos por falta grave y no procede los acuerdos tomados, como es la vacancia del decano. Además que, nunca faltó a sesiones, siendo éste otro motivo para solicitar su vacancia.

 

“Estamos convocando a asamblea de delegados para la próxima semana para que decidan el destino de los suspendidos, quienes están usurpando funciones”, expresó.