El defensor del Pueblo en la región Lambayeque, Julio Hidalgo Reyes, reveló que tras la visita desarrollada ayer a la obra de rehabilitación de autopista Chiclayo-Lambayeque, detectaron varias deficiencias ocasionadas por parte de la empresa, que en su mayoría están afectando a una gran parte de la población.
“Hemos detectado deficiencias, percances, que hace que la obra no se ejecute con mayor eficiencia. Se desconoce si la Contraloría esté ejecutando el control concurrente. Hay deficiencias evidentes”, señaló Hidalgo Reyes.
El defensor del Pueblo, confirmó que CASA, empresa ejecutora de la obra de rehabilitación de autopista Chiclayo-Lambayeque, no tiene un plan de ruta y ese sería uno de los problemas más evidentes que tiene esta obra, teniendo en cuenta que el congestionamiento vehicular, es uno de los temas que más está denunciando la población y justamente el motivo por el cual los dueños de combis y colectivos que cubren la ruta Chiclayo-Lambayeque incrementaron la tarifa de pasajes.
“No hay plan de ruta. Sin el apoyo de la Policía de Tránsito esta obra se haría con un descontrol. Nosotros como Defensoría hemos emitido cuatro medidas correctivas. Se está pidiendo la implementación de medidas de transitabilidad en los sectores donde se están haciendo los trabajaos a cargo de la empresa. Para este fin se cuenta con seis policías de Tránsito. Lamentablemente la empresa no tuvo una adecuada gestión para este aspecto, solo una coordinación”, señaló.
Sobre este punto, la Defensoría, quien llegó ayer a la obra en compañía de un contingente policial, dijo que en algo mejoró la transitabilidad porque la Policía de Tránsito tuvo una respuesta rápida para controlar el problema.
“Como punto dos, se ha establecido que el cartel de obra no tiene la información. Hay que reforzar con la información adecuada. Costo, tiempos, quién es la empresa supervisora. Es un medio que permite transparentar la inversión y eso es lo que ahora no está haciendo.
Como punto tres, se debe precisar que hay un compromiso de la Policía de colaborar con la empresa para esta labor, porque lo normal es que el contratista tenga una metodología adecuada como hay en cualquier obra”, explicó.
“En el punto cuatro, se debe señalar que la obra está retrasada. Se estima que entre tres a cuatro semanas debería culminar. Estamos dando cuenta al Ministerio de Transportes y la propia empresa (de lo detectado). Se quiere asegurar que la obra culmine con la calidad necesaria y en tiempo razonable”, sentenció.
PROBLEMAS
Se debe precisar que la población reclama que hay un desmedido incremento de pasajes de Chiclayo a Lambayeque y viceversa. Además, reclaman por el caos y desorden vehicular que se genera
Pedro Zúñiga Coronel, presidente de la Federación Universitaria de Lambayeque (FUL) de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo (UNPRG), manifestó a La Industria que los alcaldes de Lambayeque y Chiclayo se deben pronunciar.
“La mejora de la Panamericana la necesitamos, pero un pequeño tramo no puede generar tanto caos. Necesitamos que esta obra avance. Estaremos atentos para apoyar cualquier medida porque también estamos siendo afectados” expresó.
