El sector Trasporte atraviesa una crisis dirigencial, debido a la detención de los directivos de la Central de Colectivos.
La Industria buscó la opinión de dirigentes del sector para conocer su posición y propuestas para evitar que la corrupción continúe enquistada. En la tercera lista de “Los Corchines de la Corrupción”, la Fiscalía detuvo a Francisco Guarniz Vásquez y ordenó la detención del prófugo Wilson Míñope Carbajal, presidente y secretario de la organización Central de Colectivos, respectivamente.
El presidente de la Coordinadora Regional de Taxis, Segundo García Sánchez, indicó que a pesar que ambos investigados no pertenecen al sector taxis, sí daña la imagen y retrasa las gestiones, puesto que los agremiados pierden la confianza en sus dirigentes.
“Lamentamos que nuestros dirigentes estén comprometidos en actos de corrupción, en la medida que las investigaciones avancen podremos saber qué tan graves y desde qué tiempo incurren en falta”, comentó.
El dirigente mencionó que si se registró actos de corrupción, fue porque los funcionarios lo permitieron. En ese sentido, aseveró que los cambios deben iniciar desde la gerencia de Desarrollo Vial y Transportes de la MPCh.
Por su parte, el presidente de la Central de Empresas de Servicio Interurbano, Adelmo Campos Díaz, expresó que la Fiscalía deberá continuar con la investigación y conocer el grado de responsabilidad que se les imputa a los trasportistas.
“Es una desazón que existan dirigentes que estén involucrados en actos ilícitos porque mancha la imagen del gremio; sin embargo, no está totalmente definido su responsabilidad, más aún cuando no hay una medida firme (sentencia) solo hay medida preventivas”, expresó.
En tanto, el presidente de la Coordinadora de Trasporte Público, Luis Guevara Dávila, precisó que estos actos no dañan la imagen del sector, ya que pertenecen a la informalidad en otros sectores.
“No siento vergüenza porque son casos aislados, donde lamentablemente se han infiltrado estas personas”, subrayó.
Como dirigente, dijo que en reiteradas ocasiones ha propuesto a la Municipalidad Provincial de Chiclayo, que las flotas vehiculares deben estar a nombre de las empresas y no de los dirigentes, para evitar el ‘negociado’ con la venta de líneas en este sector.