El número de divorcios en la región Lambayeque está en aumento. Así lo indicó Rafael Pantoja Barboza, jefe de la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (Sunarp) de la Zona Registral N° II – Sede Chiclayo, pues en el 2018 se registraron 31 separaciones más que en el 2017.

 

Explicó que la cifra es creciente desde el 2001 cuando se atendieron 68 divorcios, en el 2002 fueron 130, en el 2003 fueron 140, pero en el 2005 la cantidad se amplió a 301 casos. Desde ese entonces, el número de separaciones se ha incrementado, en el 2018 se registraron 611 casos.

 

Esto se debe a que antes los trámites para un divorcio tenían que pasar por el Poder Judicial; sin embargo, ahora el Estado ha establecido procedimientos simplificados; es decir; las personas que quieran una disolución matrimonial lo pueden hacer judicialmente, ante el notario o la municipalidad de su jurisdicción, mencionó.

 

Añadió que existen mayores facilidades, siempre y cuando haya consenso de ambas partes, pero si el divorcio es por causal, por ejemplo por adulterio o violencia, en este caso, tiene que ser necesariamente el juez de familia quien se encargue de esta situación.

 

En enero y febrero de 2019 se han registrado 81 divorcios en la Oficina Registral de Chiclayo.

 

 

Pantoja Barboza señaló que el estado civil es importante para determinar la calidad de bien. Si una persona adquiere un patrimonio estando casado, este le pertenece a la sociedad conyugal. Sin embargo, si existe una separación puede obtenerlo en calidad de bien propio.

 

Además, registrar un divorcio en la Sunarp es necesario, pues si en la sociedad de gananciales hubo un bien, se adjudica el 50% de las acciones y derechos, convirtiéndose ambas partes en copropietarios. “Entonces es importante la inscripción para decidir el futuro de los bienes que hubieran tenido durante la vida matrimonial”, precisó.

 

 

Las personas que hayan decidido disolver su matrimonio y quieran proceder al siguiente paso, que vendría a ser la inscripción de su separación en la Sunarp, deben presentar la sentencia expedida por el Poder Judicial, en el caso de que haya sido judicialmente.

 

Por otro lado, si hicieron el trámite ante la municipalidad, es necesaria la resolución del alcalde o funcionario competente para declarar la disolución del vínculo matrimonial.

 

En el caso de los notarios, se presenta el acta notarial que es protocolizada a través de la escritura pública que desvincula la unión, manifestó el jefe de la Unidad Registral.

 

En el caso de los divorcios que son hechos ante las municipalidades, notarios e incluso ante el juez, tienen que estar ambas partes presentes, si es de voluntad propia.

 

Pero si es por causal, se inicia la demanda alegando la causal y la otra parte emplazada tiene que contestar la demanda contradiciendo o conforme lo crea a su derecho respecto a la causal invocada. Pantoja añadió que el costo de la separación es 20 soles.