El director de la Unidad de Gestión Educativa Local – UGEL Chiclayo, Alí Sánchez Moreno, sostuvo que la realidad sí exige la declaratoria de emergencia del sector Educación en Lambayeque, pero al final se debe evaluar cuál es el resultado de esta medida.

 

Ante un reciente pedido del gobernador regional, Jorge Pérez Flores y también la propuesta del ministro de Educación, Oscar Becerra, el director de la UGEL, Alí Sánchez, recordó que en los últimos años, probablemente esta sería la tercera declaración de emergencia. La más reciente fue la que decretó la gestión del expresidente, Pedro Castillo, y la anterior, durante el gobierno de Alejandro Toledo.

 

“Sin embargo, eso nos obliga a hacer un monitoreo de esos procesos, de tal manera que declarada la emergencia y terminado el periodo, tendríamos que evaluar qué tanto las razones por las cuales se declaró la emergencia, fueron superadas”, indicó.

 

Señaló que, haciendo una analogía como en Salud, si una persona entra en emergencia por equis problema, tendría que salir de emergencia cuando su salud esté recuperada.

 

“Entonces, si en Educación entramos en emergencia por problemas de plazas de docentes, infraestructura, de personal administrativo, mobiliario u otras razones, terminado ese periodo deberíamos rendir cuentas y decir si estuvo muy bien la declaratoria de emergencia y si superó aquella situación”.

 

En ese sentido, precisó que sí, la realidad exige una declaratoria de emergencia, “porque estamos encontrando directores que nos dicen profesor no tengo personal de guardianía, me falta personal administrativo o docentes”.

 

Sin embargo, Alí Sánchez Moreno, manifestó que no se debe dejar de lado la otra realidad, ya que en Chiclayo, específicamente en el distrito de José Leonardo Ortiz, por ejemplo, en los próximos días debe estar inaugurándose una nueva infraestructura educativa, “eso es algo que debemos reconocer, porque se está construyendo”.