Una protesta de motores apagados realizó un grupo de transportistas de carga pesada de Lambayeque, apoyando el paro nacional del gremio, que cuestiona al Gobierno central por el incremento del precio de los combustibles, que afecta el trabajo de miles de conductores en el país.
A nivel nacional los transportistas agremiados al Consejo Nacional de Transportes, protestan contra el precio elevado de los combustibles, la demora en el Congreso para la aprobación del Proyecto de Ley de la Devolución del 70% del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC).
Asimismo, exigen la devolución del precio de los peajes y cuestionan la labor del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) “que le da prioridad al transporte ilegal, antes que proteger al transporte formal”.
EN LAMBAYEQUE
Un grupo de transportistas de carga pesada se agrupó a la altura del óvalo de la vía de evitamiento y la carretera Panamericana, frente al Hospital Regional Lambayeque, para apoyar la medida de su gremio a nivel nacional.
En caravana llegaron los conductores escoltados por motorizados de la Policía Nacional del Perú, que en todo momento vigiló su manifestación. En cuestión de minutos ubicaron sus unidades en este lugar, para realizar una protesta de motores apagados.
COSTOS MÍNIMOS
El vicepresidente de la Unión Regional de Transportistas de la Macro Región Norte, Mario Soto Ascarza, sostuvo que el Perú entero a través de la industria del transporte “está parado, porque así lo ha deseado el Gobierno al dejar atrás todos los petitorios anteriores y sin cumplimiento”.
En ese sentido indicó que el Gobierno debe establecer los costos mínimos para que puedan trabajar. “Queremos que el Gobierno declare el transporte de carga y mercancías como un bien de interés nacional para que pueda proteger y hacer valer los costos mínimos y no hacer que las empresas trabajen por debajo de su costo”.
EXIGEN MAYOR CONTROL
Mario Soto dijo que si se mantiene el alza de los combustibles por encima de los precios internacionales se verán afectadas las empresas formales que agrupan a más de 25 mil vehículos a nivel nacional, lo que podría traer como consecuencia que se declaren en quiebra.
“Para sumarnos a los 300 mil vehículos quebrados ya”.
También exigió que se reorganice a la Sutran, porque no fiscaliza como corresponde. “La corrupción existe en la frontera con Ecuador, la frontera con Bolivia, donde ingresan transportistas peruanos con una placa boliviana y peruana, pero que no tienen ningún control (…) y si llevan mercancía, dentro de esta están los tanques de combustible que los traen a un dólar cincuenta centavos, mientras que nuestro petróleo está veinte soles”.
“En la región tenemos más de 1 500 empresas registradas, de las cuales existen más de 3 000 vehículos circulando, pero que son principalmente mypes, pequeños empresarios. Que se entienda que la industria de transporte no es un bien de grandes””
Mario Soto Ascarza
Dirigente transportes