En esta nueva etapa de intervenciones para controlar los brotes del dengue en la región, se reportaron 40% de viviendas cerradas y renuentes, lo que dificulta la labor de las brigadas, señaló el coordinador regional de enfermedades metaxénicas de la Gerencia Regional de Salud (Geresa), Henry Sánchez Mendoza.

 

“El tema de las casas renuentes y cerradas está bajando las coberturas en todos los distritos”, señaló Sánchez para indicar que se necesitaría que el 90 % de viviendas hayan sido intervenidas para lograr un exitoso control de la enfermedad causada por el zancudo Aedes Aegypti.

Por ello, explicó, desde la Geresa se retomaron las estrategias de control larvario y fumigación en un horario diferenciado de 3 de la tarde a 10 de la noche, e incluso los días domingos.

 

Precisamente, frente a la renuencia de las familias a permitir el ingreso a sus hogares, las brigadas han recibido el apoyo de las municipalidades, con sus agentes comunitarios, los centros de salud, y la propia Geresa.

 

E incluso, en el distrito con mayores casos confirmados de dengue, como es Chongoyape, se realizaron las intervenciones junto al Ejército “para darle seguridad a la población de que se está trabajando de manera multisectorial. (Pero) se han registrado casas renuentes y casas cerradas en un 30 % a 40 %, y mayormente, en los distritos de Chongoyape, Ferreñafe y Cayaltí”, anotó.

 

La región Lambayeque es una zona endémica del dengue y en la actualidad se han confirmado 1 500 casos en 28 distritos, de los cuales, solo 500 pertenecen a Chongoyape. Por debajo de él, se encuentran Cayaltí, Ferreñafe, Pacora y Zaña (en Saltur), precisó Sánchez.

 

“El problema está dentro de las viviendas porque el zancudo que transmite el dengue está dentro de ella, no fuera, no en un parque. Por tanto, la actividad (control de larvas o fumigación) se hará dentro de las casas. También es importante la limpieza que se haga en los cilindros donde se almacena agua. La región es zona endémica pero depende de todo cómo superarlo”, dijo.