Si algo caracteriza a los alumnos, ex alumnos, docentes y exdocentes del glorioso Colegio Nacional de San José es su identidad, que se ha forjado a lo largo de sus 162 años de creación y que se ha convertido en un sello, que identifica a quienes pasaron por sus aulas.
El gran Mariscal Don Ramón Castilla fue quien, el 11 de mayo de 1859 expidió la resolución suprema ordenando que se procediera a crear el Colegio Nacional de Ciencias y Artes de Chiclayo, luego de las exigencias de las autoridades comunales y representantes de la provincia.
Como cuenta la Web de la propia institución educativa, este importante paso se dio después de muchos años de solicitudes, y es cuando se logra “la dación del Decreto Supremo que ordena la apertura del referido Instituto de Instrucción en la ciudad de Chiclayo” y que funcionó al costado de la iglesia matriz en la calle San José, en lo que antes fue el antiguo Convento de San Francisco.
Es recién el 24 de setiembre de 1859 cuando se inaugura esta escuela, en una ceremonia solemne, siendo su primer director don Clemente Peralta, y “desarrolló sus actividades académicas bajo la advocación del patriarca San José de Chiclayo”.
IDENTIDAD
“Lo que ha identificado y primado a través de su historia en sus diferentes etapas, ha sido la identidad sanjosefina, que son rasgos, características y cualidades propias que nos identifican a los exalumnos y alumnos del colegio San José y que nos hacen sentir diferentes para poder contribuir y forjar siempre la grandeza del nuestra región Lambayeque”, señala Miguel Fernando Chirinos Obando, exdirector de esta escuela.
Chirinos Obando, a quien muchas generaciones conocieron como director del glorioso colegio San José, primero fue alumno de esta institución educativa, tras egresar y estudiar en la universidad, regresó en 1966, ya como docente para enseñar en la especialidad de lenguaje y literatura.
Fue el 8 de agosto de 1980, tras participar en un concurso con otros colegas, cuando asumió la dirección del plantel en la que estuvo hasta el año 1994, cuando cesó en sus funciones como docente y director. “Para mí, San José ha llenado gran parte de mi vida desde niño, joven y adulto, me ha forjado como profesional y ciudadano”.
Fernando Chirinos Obando reconoce que hoy han cambiado bastante las condiciones del sistema educativo y de las mismas instituciones educativas, por lo que “hay mucho por hacer y corregir en la educación peruana”.
Exhorta a los padres de familia y a los maestros a motivar a los niños y jóvenes, hoy cuando la educación se está dando de manera virtual. “Con las deficiencias que conocemos. (…) esperamos que esto se subsane durante el próximo año”.
ORGULLOSA DE ENSEÑAR EN EL SAN JOSÉ
Nancy Teresa Caicay Pasco, a sus 65 años, cesará en la docencia el próximo 6 de octubre de este año y lo hará en el colegio San José. Recuerda que hace más de 30 años cuando ingresó a enseñar, esta escuela tenía más de 8 mil alumnos en los tres turnos. “Fue emocionante.
Realmente cuando llegué sentí ese calor familiar de los maestros y maestras, me dio seguridad para seguir adelante”, señala, al tiempo que nos comenta que sus alumnos fueron los hijos que no tuvo y los consideró como su familia.
Hoy también se siente muy orgullosa de los logros de sus estudiantes. Indica que el año pasado, a pesar de la pandemia, lograron ganar un concurso de cuentos y este año 2021, han conseguido el primero y segundo lugar del concurso de fábula. “Es increíble trabajar en un colegio tan grande y tan bonito, con mucho calor humano. E incluso los subdirectores del turno de la tarde son muy humanitarios, rectos, son los mejores”.
Dice que en pocos días, cuando cese como maestra, saldrá tranquila y al mismo tiempo triste, “porque estoy dejando parte de mi vida, con 38 años de enseñanzas, también en diferentes lugares”.