La Contraloría General de la República (CGR) detectó presuntas anomalías en el arrendamiento de inmuebles de propiedad de la Beneficencia de Chiclayo.
Según el Informe de Visita de Control n.° 003-2021, del 17 de mayo del 2021, la Contraloría detalla que inquilinos que ocupan inmuebles de propiedad de la Beneficencia de Chiclayo no suscribieron contrato de arrendamiento.
La comisión auditora de la Contraloría solicitó a la subgerencia de Gestión Inmobiliaria de la Beneficencia la documentación contractual de 29 inmuebles.
De la revisión efectuada a la documentación proporcionada, se evidencia que 19 de los 29 inmuebles se encuentran ocupados sin contrato de arrendamiento vigente, es decir están arrendados sin la formalidad que regule una relación jurídica patrimonial, no obstante, estos cuentan con contratos de arrendamiento vencidos correspondiente a los periodos 2016, 2017 y 2019.
De acuerdo a la verificación al sistema informático de “Alquiler de bienes inmuebles” que realizó la CGR se evidenció que los referidos inmuebles se encuentran en condición de “activo”, con el registro de programación mensual de merced conductiva para el periodo 2021.
Asimismo, la Contraloría reportó la falta de cobranza de la merced conductiva, lo cual genera morosidad por S/ 3’ 504 698,34, afectando la recaudación de mayores recursos económicos.
Por otro lado, se comprobó que existe falta de cumplimiento a las cláusulas establecidas en los contratos de arrendamiento, así como verificaron arrendamientos de bienes inmuebles sin tener en cuenta tasación a valor comercial.
RESPONDEN
Ante ello, el gerente de la Beneficencia, Juan Carlos Grandez Orbegozo mencionó “todos estos (arrendamientos) están judicializados, tuvieron su tiempo contractual, se judicializaron por ciertos problemas que existieron, no solamente por la pandemia sino por retrasos en los pagos, se les hizo juicio y sigue su proceso judicial, nosotros no podemos ir y sacarlos a la deriva”.
“No suscriben contrato a raíz de estar judicializados, enviamos los contratos correspondientes regularizándolos, sino que están en su derecho no inscribirlos porque no están de acuerdo con el nuevo tema contractual”, agregó.
Respecto a la observación en la merced conductiva, Grandez refirió “todos los años se aumenta la merced conductiva en base a una tasación del Colegio de Ingenieros, en base a eso muchos inquilinos no quisieron ahondarse al nuevo pago, pero ese es un tema muy independiente a nosotros … estas personas no quisieron cancelar, hay algunos que siguen posesionarios, pero con la nueva merced conductiva no la quieren asumir, por tal motivo ejecutamos judicialmente”.