Desde el 1 de julio se dio inició la Fase 3 de la Reactivación económica y la reapertura de negocios de manera gradual, según el Decreto Supremo Nº 117-2020-PCM, que incluye alrededor de 60 actividades comerciales, con lo cual se busca poner en marcha al 96% de la economía en el país.

 

En Lambayeque, donde muchas de las actividades económicas también están en proceso de reactivación, la socialización de la estrategia de gestión de prevención, protección y control del coronavirus desde el Gobierno regional frente al reinicio de las actividades productivas sigue siendo desconocida para representantes de la sociedad civil y algunas autoridades.

 

“Desconozco del Gobierno regional. No tenemos mucha información, mayormente tenemos coordinaciones con el Comando Covid regional, desconozco los planes o las estrategias que tiene el Gobierno regional”, sostiene el alcalde de la provincia de Lambayeque, Alexander Rodríguez Alvarado.

 

En ese sentido señala que dicho planes se tienen que trabajar en coordinación con el gobierno central, regional y local, para poder evitar que el contagio se siga extendiendo en la ciudadanía de la región.

 

“Tiene que ver con sensibilización y las empresas que abren sus negocios que tengan en cuenta las medidas sanitarias que se están exigiendo y protocolos de ministerio de Salud”, refiere.

 

A su turno, Jorge Alarcón Gasco, coordinador de la Asamblea de Delegados de Organizaciones de la Sociedad Civil de Lambayeque (ADOSCIL), manifiesta desconocer sobre la existencia de un plan de contingencia o de reactivación o en todo caso que esté a la vista para su aplicación, lo que para él constituye un riesgo, frente al covid.

 

“Que puede haber un rebrote y no podemos descuidarnos, por la cantidad de fallecidos que hay a diario. La curva se mantiene y es preocupante, porque estamos en un promedio alto”

 

Un claro ejemplo de que no existe un plan, indica, es el comercio ambulatorio, lo que demuestra que no hay articulación del Gobierno regional, con la municipalidad y la Policía Nacional. Lo mismo sucede en los bancos, donde las aglomeraciones siguen siendo peligrosas, tal como ocurrió durante las medidas de emergencia sanitaria.

 

“Es una burla. Y nadie cumple nada, porque no se ha hecho nada. Lambayeque está en piloto automático a lo que salga o a lo que venga. No hay liderazgo de ninguna autoridad que pueda asumir la responsabilidad de saber qué hacer tras la reactivación económica”.

 

Finalmente, el coordinador de la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza de Lambayeque, Luis Montenegro Serquén, apunta que cuando los planes se generan sin la participación de la comunidad, es muy probable que no se acaten.

 

Siempre que se construya un dictamen o una norma tiene que participar la sociedad civil, sobre todo en épocas de pandemia. Hacemos una planificación con buena intenciones en el escritorio, pero en la calle, todo sigue igual”, refiere

 

Señala que los municipios, el gobierno regional, ni la sociedad civil han estado preparados para riesgos, y sabiendo que el covid aún sigue entre nosotros, se hace necesario que se informe de que continúe las indicaciones de protección del Ministerio de Salud.