Durante el estado de emergencia por el covid-19, se han registrado diversas denuncias por no ejecutar el presupuesto o por mal utilizarlo en agravio de la población calificada de pobre o extrema pobreza; por lo que muchas voces coinciden en demandar a las autoridades nacionales, regionales y locales, a no permitir más actos de corrupción.

Desde la Diócesis de Chiclayo, el obispo Robert Prevost señaló que la lucha contra la corrupción no puede parar, muy por el contrario, se debe insistir para que los recursos destinados para el hambriento o pobre lleguen y sean bien utilizados.

Durante estos más de 100 días de emergencia, muchas personas han quedado sin trabajo, otras han enfermado, por lo que se requiere de la ayuda de las autoridades.

“Hay que aprender a ser una sociedad solidaria, como cristianos y católicos, aprender a ser solidarios y fraternos, hay que luchar contra la corrupción que continuamente es fuerte en algunos sectores. Hemos visto que dinero que debió ser destinado para los hambrientos o pobres, que están pasando por necesidad no les llegó; entonces hay exigencia de seguir con esta lucha contra toda forma de corrupción para vivir con la fraternidad y solidaridad”, sostuvo la autoridad eclesiástica.

El gobierno autorizó la entrega de canasta de víveres para las familias más necesitadas, pero en algunos casos fueron personas con buena condición económica que se beneficiaron. Estas personas no debieron aceptar porque se vuelven en cómplices.

Monseñor pidió a las autoridades no olvidar a la población que, desde antes de la emergencia, ya vivían en situación de pobreza extrema y que ahora sufren más tras soportar la pandemia del coronavirus que aún causa dolor y llanto en todo el país.

La autoridad católica, también brindó su mensaje a la población. Les recordó que han recibido un gran don de Dios, que es la vida, es por eso que deben hacer todo lo posible para defenderla y proteger su salud, teniendo en cuenta que poco a poco se va levantando varias restricciones, a pesar que continúa el contagio por el covid.

“Si es cierto que el gobierno está cambiado las restricciones y que el nivel de contagio ha ido bajando, pero todavía está muy presente el peligro de contagio por covid. Invitó a todos a seguir observando y cumpliendo las normas de distanciamiento social, lavarse las manos y usar la mascarilla”, acotó monseñor Prevost.

Al levantarse la cuarentena, habrá una nueva normalidad, pero la población debe tener mucha paciencia, incidió el obispo de la Diócesis de Chiclayo.